El fiscal antidroga de Galicia, José Luis Conde Salgado, resaltó ayer el "éxito" que se registró en 2009 en la represión y persecución del narcotráfico en la comunidad, tanto en el comercio de cocaína como de heroína, sustancia que se daba por desaparecida y que experimentó un gran repunte.

Constató un "desplazamiento" de la persecución de la droga hacia la zona de Andalucía, pero advirtió de que todos los grupos criminales que operan en este campo delictivo "siempre intentan entrar". "Hay una especie de sucesiones, unas grandes ganancias que se obtienen con el comercio de la droga y, lógicamente, no desisten de esta actividad", subrayó.

Conde Salgado no circunscribió el problema del narcotráfico a Pontevedra, sino que su preocupación abarca a "toda la costa gallega". "Quizá a través de los medios de comunicación se ha aireado mucho la zona de la provincia de Pontevedra, pero no podemos olvidarnos de la costa de A Coruña y de Ferrolterra, en unión con Lugo y Asturias", matizó.

No ocultó que en ocasiones hay "insuficiencia" de medios policiales para poder desterrar "de una vez por todas" este tipo de organizaciones. "Si en Galicia tenemos 1.500 kilómetros de costa, es muy fácil que se pueda colar un desembarco, de ahí que resulte muy importante no centrarse solamente, como se suele hacer, en Arousa, porque el narco existe en la costa de A Coruña o Lugo, tal y como se ha demostrado en los 20 años que llevo en esta cuestión", remarcó.

En contraposición con el incremento del consumo de heroína, en 2009 se constató "bastante reducción" en las drogas de diseño y el éxtasis "casi ha desaparecido". Como novedad, se han realizado aprehensiones "no muy importantes" de un anestésico que usan los veterinarios que, mezclado con algún tipo de droga, "produce efectos alucinógenos".