El temporal de lluvia, que afecta al litoral de la provincia de Lugo, provocó la destrucción de varias naves por desplome de taludes de tierra en Ribadeo, carreteras cortadas en Barreiros y O Valadouro y recomendaciones en el consumo de agua en Burela.
Los 150 litros por metro cuadrado caídos en los últimos cinco días en Ribadeo (Lugo), según datos de MeteoGalicia, han provocado desprendimientos de tierra, como el que sepultó dos naves en el puerto comercial de Mirasol.
Una lengua de tierra se abalanzó a primeras horas de la mañana de ayer sobre estos dos almacenes portuarios, que quedaron inutilizados.
El jefe de Portos de Galicia, Jacinto Parga, y el alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez, que visitaron ayer la zona afectada, acordaron encargar las obras para estabilizar el talud que se desprendió, que se encuentra al lado de las naves. Éstas serán derribadas dada la gravedad de los daños sufridos.
Ayer no llovió intensamente, unos 18 litros por metro cuadrado en Ribadeo, pero lo hizo sobre mojado, porque entre el viernes y el lunes pasados las precipitaciones no dieron tregua.
Pero no solo Ribadeo se vio afectado por las lluvias de los últimos días. Hubo inundaciones en chalés de varias urbanizaciones del municipio de Barreiros, sitas en San Cosme y en San Miguel de Reinante. En estos casos pudo contribuir a agravar la situación la mala canalización de las aguas que bajan de las obras de construcción de la Autovía del Cantábrico (A-8).
Por algunas de las pistas de acceso a las playas de Barreiros no se podía transitar porque parecían auténtico ríos y los vecinos de la capital municipal, San Cosme, se quedaron durante horas sin agua por sendas roturas en la tubería de suministro, una a las diez de la noche del pasado lunes y otra a las seis de la mañana de ayer.
El reventón de esta tubería, por dos veces en el mismo lugar, provocó la inundación de la oficina de Correo, lo que provocó graves daños en la correspondencia y en el mobiliario.
También hubo inundaciones en los municipios lucenses de O Valadouro y A Pontenova. En este ultimo, un vecino de la parroquia de Conforto, denunció que le entró agua en su casa al desbordarse un arroyo próximo.
En el municipio de Burela persiste la recomendación de moderar el consumo de agua solicitado por el concello para facilitar su depuración en la Estación de Tratamiento. Las fuertes lluvias causaron también importantes inundaciones en las localidades asturianas próximas a La Mariña lucense.
