Los libros lo abarcan, literalmente, todo, desde las historias más fantásticas o espeluznantes al conocimiento científico, la vida de artistas, reyes y santos, o los secretos de la cocina. Los hay para todos los gustos y para prácticamente todos los momentos de la vida. A todos ellos está dedicado el 23 de abril, una fecha que se celebra en todo el mundo desde 1995, cuando la UNESCO proclamó esta fiesta, de origen español, como el Día del Libro y del Derecho de Autor, coincidiendo con la muerte de tres grandes figuras de la literatura universal: Miguel de Cervantes, Garcilaso de la Vega y William Shakespeare.
De los miles de títulos que componen la biblioteca mundial, la catedrática de Inmunología África González, se queda con “El Quijote”. Barre para casa, porque la reconocida científica de la Universidad de Vigo es natural de Alcalá de Henares, donde nació Miguel de Cervantes, una ciudad impregnada del espíritu cervantino.
“La primera vez que lo leí tendría unos 14 años. Mi padre era un gran lector y teníamos muchos libros en casa. Más tarde, lo volvería a leer, ya con otros ojos”, afirma González, que entonces vivía con su familia en un pequeño piso situado muy cerca de la que era la casa de los padres de Cervantes.
Para la inmunóloga, la que está considerada la obra cumbre de las letras hispánicas es una historia llena de “sabiduría, ironía y entretenimiento”. “Sería el libro que me llevaría a una isla desierta para no aburrirme. ‘El Quijote’ te muestra una locura amable, sencilla y llena de ternura, con el contrapunto de la serenidad y la conciencia de Sancho”, relata la científica y profesora, autora del libro de divulgación “Inmuno Power. Conoce y fortalece tus defensas”.
Otros libros que recomendaría son “Las intermitencias de la muerte” y “El ensayo de la ceguera”, de José Saramago. “Es un escritor que me gusta mucho”, dice.
Toño López, vocalista del grupo The Soul Jacket, reconoce que no es un gran lector y que tiene una cuenta pendiente con la lectura. Más por falta de tiempo que por ganas, afirma. “Nunca encuentro un momento y reconozco que también he perdido un poco el hábito”, comenta el cantante, aficionado a las novelas de misterio y ciencia ficción. De hecho, uno de sus escritores favoritos es Stephen King.
Pero si hay que hablar de un título que le haya impactado especialmente ese es “El perfume” (1985), del alemán Patrick Süskind. Entre otras razones, porque fue su compañero en uno de los viajes que más le marcaron: el que hizo a la India en 2008, en un momento en el que buscaba un cambio en su vida y salir de su área de confort.
“Me lo recomendaron una noche que estaba con unos amigos en el pub Malasaña y al día siguiente fui a comprarlo. Me resultó impactante porque hablaba de los olores y yo recorría un país también de olores y de muchos contrastes”, explica el cantante de The Soul Jacket, que está a punto de sacar nuevo disco, “K.I.C.K Radio”.
Cuando con 13 años leyó “A esmorga”, un libro censurado por la dictadura franquista, Ignacio Vilar decidió que, si algún día era director de cine, haría una película sobre esta novela de Eduardo Blanco Amor. En 2014, cumplió su sueño. Su adaptación cinematográfica obtuvo una nominación a los Goya al mejor guion adaptado.
“Un dos estudantes externos do internado onde eu estaba deixoumo. O libro veu de Arxentina porque aquí estaba prohibido. Foi unha novela que me impactou moito. Para mín é, sen dúbida, unha das grandes obras do século XX”, afirma el cineasta, que prepara una serie histórica.
El director y productor ourensano se confiesa un entusiasta de los libros sobre la historia de Galicia, que además forman parte de su trabajo de documentación. Este es el caso del que se está leyendo ahora, “Unha etapa estelar e conflictiva de Galicia (a segunda metade do século XIV), de Francisco Rodríguez, un libro revelador, dice, sobre la relevancia del reino medieval gallego medieval.
Dice que no es un lector voraz, aunque Antonio Durán, Morris, siempre anda con algún libro en la mano. Por ocio o por exigencias del guion. En estos momentos, alterna dos: “Episodios de una guerra interminable”, de Almudena Grandes, con él prepara un proyecto sobre la guerra civil, y las memorias de Fernando Fernán Gómez, “El tiempo amarillo”. “Este es casi un libro de compañía porque las cosas que cuenta son divertidísimas. Además, me gustan mucho las memorias de los actores”, afirma el popular actor vigués, que acaba de cerrar la exitosa gira de “Shock 1” y “Shock 2” y en breve se incorporará a varios proyectos para la pequeña y la gran pantalla.
Uno de los primeros libros que leyó, siendo un adolescente, y que recuerda con más cariño es “El principito”, de Antoine de Saint-Exupéry, aunque uno de los que más le impresionaron fue “A esmorga”, que después interpretaría junto a Karra Elejalde y Miguel de Lira.
Muchos son los libros que despertaron en María Oruña ese deseo de leer sin parar, entre ellos, “Edad prohibida”, de Torcuato Luca de Tena, y “La Colmena”, del Nobel gallego Camilo José Cela, pero si hay un título que es especial en su larga lista de favoritos es “Al este del edén”, del también Nobel John Steinbeck. “Lo leí de muy pequeña y me fascinó. Me hizo soñar con ser capaz de escribir una historia tan viva y real como aquella”, reconoce la escritora viguesa, que el próximo 18 de mayo publicará “El camino del fuego”, la quinta entrega de la serie “Los libros de puerto escondido” que protagoniza la inspectora Valentina Redondo y que estará ambientado en Escocia.
Entusiasta de las autobiografías, recomienda leer la de la reina del misterio, Agatha Christie. “Me pareció sorprendente cuando la leí –comenta–. Me resulta muy interesante leer sobre las vidas y las decisiones que toman las personas en su tiempo”.
Perteneciente a una amplia saga de artistas y escritores, el pintor y profesor de la EMAO de Vigo Darío A. Basso tiene varios libros de cabecera. Uno de ellos es “Los tarahumara”, de Antonin Artaud. Se lo recomendó el también pintor Antón Lamazares. “Me ha ayudado mucho para inspirarme y para ver la pintura desde una parte menos racional y más mística”, explica el artista, que en estos momentos lee “La pintura y el mal”, de Miguel Ángel Campano.
Otro libro que le ha influido es “Viaje a las regiones equinocciales del nuevo continente”, de Alexander von Humboldt, que narra el viaje científico de este botánico del siglo XVIII. “Habla también de la emoción como punto de partida para la investigación y esta visión donde la parte más sentimental da pie a reflexionar desde un punto de vista científico me interesa mucho”, sostiene.