El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) permitirá que los países con menos recursos puedan vender y fabricar sus test serológicos, unos dispositivos con una fiabilidad cercana al 100% que detectan si una persona tiene anticuerpos contra el SARS-CoV-2. El acuerdo para facilitar esta transferencia tecnológica fue firmado ayer por la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez; el director ejecutivo de Medicines Patent Pool (MPP), Charles Gore, y la ministra de Ciencia, Diana Morant, en un acto en el que el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, agradecío –en un vídeo– la generosidad del CSIC y pidió a otros países que sigan el ejemplo.

Según este acuerdo, el CSIC transferirá la tecnología para fabricar los test a MPP, una organización de salud pública de Naciones Unidas que se encargará de seleccionar a los países que estén interesados en adquirir y fabricar los ‘kits’ de diagnóstico a un precio asequible para que esta herramienta esté disponible para todos. Se trata de la primera vez que un centro público de investigación cede gratis su tecnología, ya que lo habitual es que el organismo investigador que tiene la patente la ceda a cambio del cobro de regalías.