Quienes alegan haber pasado la infección para no vacunarse contra el COVID-19 tienen cada vez menos argumentos. Un estudio citado por “Nature” apunta que las reinfecciones después de la infección por SARS-CoV-2 son probables al cabo de uno o dos años. Estimaciones basadas en la evolución viral pronostican un riesgo del 50 por ciento 17 meses después de una primera infección si no se toman medidas como el uso de la mascarilla y la vacunación.

Se trata de una predicción a partir de modelos basados en la relación genética entre el virus que causa la enfermedad de COVID-19 y otros coronavirus. “La inmunidad es relativamente de corta duración”, afirma en “Nature” Jeffrey Townsend, bioinformático de la Escuela de Salud Pública de Yale (Estados Unidos) y coautor del estudio. Avisa que la población “debe vacunarse aunque se haya infectado”. Townsend reconoce que se tardará años en averiguar cuánto dura exactamente la inmunidad natural postinfección de SARS-CoV-2, pero que conviene calcularlo antes.

Towsend y su equipo estimaron la disminución de los niveles de anticuerpos después de la infección por SARS-CoV-2 y de otros factores necesarios para comprender el riesgo de reinfección. Para ello utilizaron datos de un estudio anterior sobre los tres coronavirus en circulación continua que causan resfriados comunes. Como todavía no hay datos a largo plazo sobre el coronavirus del COVID, llenaron los huecos combinando datos genéticos del SARS-CoV-2, los tres coronavirus endémicos del resfriado y los dos parientes cercanos del nuevo coronavirus, el SARS-CoV y MERS-CoV. Así construyeron una especie de árbol genealógico viral. Después, los autores utilizaron ese árbol para modelar cómo los rasgos virales han evolucionado con el tiempo.

El resultado, que sorprendió a Townsend, es que la inmunidad natural al SARS-CoV-2 dura menos de la mitad que la conferida por los coronavirus del resfriado. Así, el riesgo de reinfección de COVID aumenta un 5% a los 4 meses y un 50% a los 17 meses de la infección.

Una experta citada también por “Nature”, Sarah Cobey, bióloga evolutiva de la Universidad de Chicago, confirmó que es esperable que la inmnidad a este coronavirus decrezca con el tiempo, pero que tal vez es demasiado pronto para predecir con qué velocidad lo hará, dado que esta investigación se basa en el supuesto de que las similitudes genéticas entre los virus pueden predecir similitudes en los rasgos relevantes para la reinfección, algo que no da por seguro.

Otro estudio centrado en análisis estadístico va en la misma línea, al sugerir que la inmunidad de rebaño es imposible de lograr sin vacunas, solamente con un alto índice de infecciones. Se basa en el caso de Irán: se cree que prácticamnente todos sus habitantes han pasado el virus en algún momento de la pandemia, incluso más de una vez. Las mayores incidencias se dieron en las provincias de Sistan y Baluchestan, con tasas de ataque del 259%. Los investigadores, citados por “New Scientist”, lo atribuyen al decaimiento de la inmunidad con el tiempo, a la variante delta, más transmisible, o a una combinación de ambos factores.