El estallido del coronavirus ha sepultado cientos de actividades y ha arrasado millones de empleos. La declaración del estado de alarma hace ya un año supuso un parón sin precedentes en la industria del ocio nocturno, una situación que con las restricciones sanitarias impuestas para evitar la propagación del virus ha llevado a discotecas y salas de fiesta a tener que reinventarse para sobrevivir a la crisis. Algunos empresarios de la noche reconvirtieron sus locales en restaurantes o establecimientos takeaway, otros mantienen la persiana bajada a la espera de que el Gobierno dé luz ver a su reapertura.

El impacto de la crisis que desató el estallido del coronavirus deja al sector del ocio nocturno unas cuentas en números rojos. En Galicia, las discotecas, pubs y salas de fiestas acumulan ya más de 300 millones de pérdidas por el parón de la actividad impuesto por el COVID. Pero algunos ya dieron por hecho que no sobrevivirán a la pandemia porque 200 locales ya han echado el cierre. Así lo revela el Estudio de Impacto del Coronavirus en el Ocio Nocturno y los Espectáculos, realizado por la Asociación de Empresas de Ocio en Galicia (Galicia de Noite) junto con la patronal España de Noche. El informe recoge también el impacto de la pandemia en la facturación, que ha caído en picado: en 1.018 millones.

El sector asegura estar “al límite”, con una situación “asfixiante” ante un crisis sin precedentes que temen, de no permitir la reapertura, los negocios seguirán siendo engullidos por las facturas e impuestos que se acumulan ante la falta de ingresos. El informe advierte de que “la capacidad de resistencia” de los empresarios “se encuentra al límite”, con un retroceso en la facturación de más del 84%. Ante esta “asfixiante situación”, propietarios de discotecas, pubs y salas de fiesta auguran que más del 70% de las pymes del sector desaparecerán si antes del verano “no se reabren los locales o se inyecta un plan de ayudas económicas directas”.

Para tratar de evitar cierres masivos en el sector y garantizar su supervivencia ante una crisis sin precedentes, Galicia de Noite exige al Gobierno central que “asuma su compromiso” e “incluya en su próximo paquete de medidas económicas un plan de rescate específico para el sector”. “Necesitamos salvar empresas y puestos de trabajo, porque desde el Gobierno regional las ayudas que llegan son insuficientes y desde Madrid no pueden desentenderse y ceder toda la responsabilidad a las autonomías”, lamentan desde el colectivo.

Se cumple un año desde que se produjo el cierre de los primeros locales, coincidiendo también con un nuevo mazazo para el sector, aunque ya avisado con anterioridad, para los trabajadores del ocio nocturno: el toque de queda mantiene la prohibición de la actividad nocturna en todas las ciudades españolas hasta el 8 de mayo. Ante esta situación, Galicia de Noite se ha sumado a la puesta en marcha de una nueva acción reivindicativa nacional, bajo el lema Un año cerrados, ¡Rescate ya!, para “exigir una compensación económica urgente y denunciar los principales problemas provocados por las escasas ayudas existentes”.