Un tribunal de La Haya ha ordenado el levantamiento inmediato del toque de queda decretado por el Gobierno de Países Bajos para contener la pandemia, por entender que limita libertades fundamentales y se debía haber consultado con el Parlamento. Los jueces, que se pronunciaron a raíz del recurso de un grupo negacionista, determinaron que, pese a que el Ejecutivo de Mark Rutte hizo uso de una ley que le confiere poderes especiales en situaciones excepcionales, en el caso del toque de queda no había una “urgencia especial”. Considera que cualquier medida que interfiera en las libertades de movimiento debe llegar después de una revisión “extremadamente cuidadosa”.