Diego Carcedo negó que ser corresponsal de guerra sea algo heroico y aseguró que la misión de estos periodistas es contar lo que sucede, por lo que la primera regla es salir con vida. "Un reportero de guerra no asume más riesgos que los que asumen los marineros que salen a la mar. El periodista va a informar, no de suicida", dijo.

También habló del futuro del periodismo con la irrupción de las nuevas tecnologías y explicó que una cosa son las ventajas que ofrecen y otra es su utilización. En este sentido, se refirió a las conocidas como fake news (falsas noticias), lanzadas con intereses políticos y económicos para desestabilizar. "Son un instrumento de intoxicación de la sociedad y se están convirtiendo en una nueva forma de guerra. Hoy se usan las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías para difundir mentiras disimuladas, manipuladas dirigidas a distintos sectores sociales susceptibles", explicó el periodista, que puso como ejemplos el Brexit, tras y la victoria de Donald Trump, consecuencia, explicó, de sendas campañas de Rusia para tener una Europa dividida y un gobierno estadounidense débil. "Los rusos tienen muy perfeccionadas las técnicas de fake news desde la guerra fría", aseguró.

También se refirió a la situación de Venezuela, que le gustaría cubrir como periodista. "Iría ahora mismo", reconoció. Censuró duramente el sensacionalismo con el que algunos medios trataron el suceso del pequeño Julen, que calificó de "lamentable", e invitó al público a buscar el pluralismo. "La tendencia del lector en España es leer el periódico o ver la cadena que defiende sus ideas. Sin embargo, siguiendo distintos medios se puede tener una buena información y tener una buena opinión personal". dijo.