"Ya no sabemos andar o pasear; subimos a la maquinita para todo, hasta para ir a comprar el pan cuando está lloviendo, ¿no sabemos que existen los paraguas?, reflexionó ayer Jeanne Picard, fundadora de la ONG Stop Accidentes, en la charla coloquio "Recuperación do espazo público para as persoas" que Club FARO celebró en la Casa da Cultura de Tomiño. Coincidió con ella el otro ponente, el consultor de movilidad Fernando Nebot, quien atribuyó parte de esa tendencia de "utilizar el coche para todo" a que "hemos abandonado las calles por el peligro que corremos en ellas".

Uxío Benítez, diputado de Mobilidade y concejal de Planificación Territorial, ejerció de moderador y anfitrión en este evento patrocinado por la Diputación de Pontevedra. Benítez comenzó su intervención recordando que, precisamente, un 13 de diciembre fue enterrada su abuela. "Morreu atropelada por un coche en Vigo nunha época na que as rúas estaban sendo invadidas polos automóviles; hoxe esa rúa, a Montero Ríos, é peatonal", contó Uxío a sus vecinos y vecinas, dejando en el aire muchos de los aspectos a tratar en dicha conferencia.

"No fue un vehículo el que atropelló a tu abuela, fue un conductor, que es el único responsable a la hora de guiar el coche", le contestó más tarde Jeanne Picard, que también contó cómo su hijo perdió la vida cuando se cruzó en su camino un coche conducido por una persona que volvía de fiesta. "Stop Accidentes nació de la rabia que sentí cuando descubrí que estas cosas no son accidentes y que se pueden evitar", manifestó la fundadora de esta asociación de afectados por accidentes de tráfico.

Picard, nacida en Francia y casada con un gallego, aseguró echar de menos la Galicia que descubrió en los años sesenta. "El cambio ha sido radical. Antes la gente iba caminando a todos los sitios; ahora hemos cambiado esa tranquilidad por la velocidad, que es la primera causa de muerte entre la juventud", continuó, al mismo tiempo que animó a todos los presentes a cambiar de hábitos, a no aparcar los vehículos en los centros urbanos y a disfrutar de los paseos. "Es lo que te recomienda el médico cuando empiezas a tener una edad? sal a pasear", alentó.

Por su parte, Fernando Nebot, redactor de numerosos proyectos de recuperación del espacio público, expuso algunos de esos motivos que han llevado a la sociedad actual a abandonar la vía pública en calidad de peatones. "Las personas que quieren caminar se ven condicionadas por los vehículos. El automóvil puede provocar un peligro", relató, al mismo tiempo que puso de manifiesto que "los niños han dejado de jugar en la calle porque sus padres tienen miedo". En este sentido, Fernando, Jeanne y Uxío coincidieron en que parte de este problema está en la educación y en la publicidad "que nos bombardea con eslóganes en los que se nos dice que el coche domina la ciudad".

Para combatir esto, Fernando Nebot explicó que, aunque hay muchos tipos de territorios y no todos se pueden tratar igual, si hay un denominador común, las personas. Así, para que los caminantes se vuelvan a sentir incluidos en el espacio público y, por consiguiente, mejore la seguridad vial, sería necesario "crear un espacio en el que todos pudiéramos coexistir". Esto se conseguiría "rebajando la velocidad de los vehículos en carretera, disminuyendo el número de automóviles y creando un orden de prioridades en el que el primero fuera el peatón, el segundo la bicicleta y el tercero el coche".

Este cambio de prioridades que propusieron Fernando y Jeanne daría, además, como resultado, "la recuperación de la vía pública como un espacio de convivencia en el que socializar unos con otros y desarrollar hábitos de vida saludables".

Dichos argumentos sirvieron para la reflexión del público presente, entre los cuales se encontraba la alcaldesa de Tomiño, Sandra González, concejales y otros regidores locales de Concellos cercanos como O Rosal o Salceda. Tras las reflexiones llegaron las preguntas de los vecinos, los cuales destacaron la necesidad de poder establecer un "modo coche" que imposibilite el uso del teléfono móvil al volante; la incertidumbre sobre la llegada en el futuro del coche autónomo y de si será este más o menos seguro; o la importancia de hacer llegar a los ciudadanos conferencias como la ofrecida ayer en Tomiño por Club FARO para refrescar algunas prioridades fundamentales sobre seguridad vial y espacios públicos.