En Galicia, el consumo de tabaco entre la población de 25 a 44 años se redujo de un 25,4% en 2007 a un 21,8% en 2015 --un 17,6% en los menores de 16 años--, pero la cifra de fumadores de tabaco de liar "aumenta" y la edad media de inicio del consumo se mantiene en los 16,4 años.

Así lo refleja el estudio publicado por la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas), que se asienta en datos de la Consellería de Sanidade.

A nivel estatal, el 72,5% de la población española de entre 15 y 64 años reconoce haber consumido tabaco "alguna vez en su vida", según los datos del informe 2015 del Plan Nacional sobre Drogas impulsado por el Ministerio de Sanidad. Así, este porcentaje se ve reducido frente a 2013, cuando el consumo era del 73,1%. Sin embargo, la edad de inicio del consumo de esta sustancia psicoactiva se mantiene en los 16,4 años.

Por sexos, a nivel nacional, los hombres en el año 2015 -último informe publicado del Plan Nacional sobre Drogas- representaban al 34,2% de los consumidores diarios dentro del total de fumadores reconocidos, frente a un 27,3% de mujeres. Entre los jóvenes --edades entre los 15 y los 24 años--, esa distancia se reduce, con un 25,3% de hombres que consumen tabaco a diario frente a un 22,5% de mujeres.

De este modo, las cifras indican, tal y como asegura el Servizo Galego de Saúde (Sergas) en su página web, que el tabaco es "una de las mayores amenazas para la salud pública que tuvo que afrontar el mundo", ya que mata a "casi 6 millones de personas al año", de las cuales "más de 600.000 son no fumadores expuestos al tabaquismo pasivo". Además, afirma que "cada seis segundos muere una persona a causa del tabaco", lo que representa "una de cada diez muertes en personas adultas".

El Sergas alerta que, desde el primer consumo, el tabaco produce efectos "negativos", que se concentran en "tos, menor capacidad respiratoria y menor resistencia física", además de "mayor susceptibilidad a enfermedades como asma y alergias". A largo plazo, advierte de que puede "causar cáncer" y "otras enfermedades graves".

Composición

Sobre la composición química de los cigarrillos, el Servizo Galego de Saúde ha explicado que el tabaco contiene "casi 4.000 sustancias de las que más de 40 causan cáncer".

Entre ellas se encuentra la nicotina, responsable de la dependencia; alquitrán, utilizado en el asfaltado de las carreteras, responsable del cáncer de pulmón; monóxido de carbono, mortal en espacios cerrados con combustión deficiente; amoníaco, usado como limpiacristales; xileno, en rotuladores; cadmio, material de las pilas; o plomo, empleado en tintes para el pelo.

También incorpora acetona, usado en quitaesmaltes; propilenglicol, como anticongelante para coches; butano, combustible de los mecheros; turpentina, ingrediente del aguarrás; fósforo, en matarratas; arsénico, en matahormigas; metopreno, en matapulgas; formaldehído, empleado en la conservación de cadáveres; y cianuro de hidrógeno, utilizado en las cámaras de gas.