Los obispos españoles reunidos esta semana en la 110 Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE) se unieron ayer a la oración por los menores víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia, y pidieron perdón.

Al finalizar los trabajos de la sesión de la tarde de esta Asamblea, durante la habitual oración ante el Santísimo Sacramento, los prelados rezaron conjuntamente el salmo Miserere (sal 50) que dice: "Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado".

La Iglesia celebró ayer la Jornada de oración por las víctimas de abusos. Cada comunidad cristiana se ha unido a esta oración de modo diverso, en el marco de la celebración de la eucaristía o de otros modos, según informó la Conferencia Episcopal Española.

Se trata de la primera vez que la Iglesia española celebra esta jornada de oración, desde que el Comité Ejecutivo de la CEE acordara en su 409 reunión que el 20 de noviembre se institucionalizara como un día de oración por las víctimas de los abusos a menores. Previamente, el Pontífice había invitado a las conferencias episcopales a elegir "un día apropiado en el que orar por las víctimas de abuso sexual" como parte de la iniciativa de la Jornada Universal de la Oración.

La CEE optó por el Día Universal del Niño por ser una jornada en la que se "quiere llamar la atención sobre la situación de los más desfavorecidos, dar a conocer los derechos de la infancia y concienciar de la importancia de trabajar día a día por su bienestar y desarrollo".

En su reunión de ayer, los obispos españoles rechazaron la ideología de género y las técnicas reproductivas que convierten a los hijos en un "producto de laboratorio", al tiempo que condenaron la violencia machista.

El cardenal arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, señaló que la ideología de género "niega la diferencia y la reciprocidad natural de hombre y mujer" y "vacía el fundamento antropológico de la familia". Además, avisaron de que esta ideología se traslada a "leyes y proyectos educativos".

"La sexualidad binaria, masculina y femenina, tiene como fin la donación íntima y la transmisión de la vida. Aunque el género tenga un fuerte componente cultural, no es independiente del sexo. No es acertado, consiguientemente, afirmar que exprese subordinación de la mujer el que conciba, geste y alumbre a los hijos; como no indica privación el que el varón no realice esas actividades vitales", argumentan.

Blázquez condenó la violencia machista y lamentó el asesinato a manos de sus parejas o exparejas de casi medio centenar de mujeres y ocho niños en lo que va de año. "La idéntica dignidad personal del varón y la mujer nos mueve a rechazar toda forma tanto de prepotencia y autoritarismo como de discriminación y humillación. ¿Cómo es posible que la suma intimidad entre personas se convierta en violencia suprema? ¡Cuántas mujeres han muerto en el año en curso a manos de sus maridos o convivientes, parejas o consortes!", exclamó.