Los biobancos hospitalarios de Galicia, en los que se encuentran depositadas más de 140.000 muestras de tejidos y fluidos de pacientes, reivindican su valor como "herramientas para el desarrollo de la sanidad" y para la mejora de la asistencia, y proclaman que no son meros proveedores para la comunidad científica. Sus responsables confían en la "fortaleza" que les dará la Rede Galega de Biobancos, que se presenta el 6 de octubre, y reclaman mayor respaldo económico de la administración gallega porque precisan plantillas estables.

Los biobancos sanitarios son establecimientos sin ánimo de lucro que acogen una colección de muestras biológicas de origen humano, concebida con fines diagnósticos o de investigación biomédica.

En Galicia existen cuatro biobancos, en las áreas sanitarias de Vigo, A Coruña, Santiago y Lugo. En total se almacenan más de 140.000 muestras de tejido (sobre todo tumores), biopsias líquidas, ADN, o fluidos como plasma, suero o líquido cefalorraquídeo. Además de estas muestras, en el caso del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo (HAC), existe un "banco" de cerebros, con más de 180 ejemplares.

La inmensa mayoría de las muestras proceden de "excedentes quirúrgicos", como explica la responsable del biobanco de Vigo, Vanesa Val, y "siempre previo consentimiento informado" de los pacientes. Así, por ejemplo, cuando se realiza una extracción de un tumor en un quirófano, se rescata una parte para conseguir una o varias muestras que serán conservadas en el biobanco, o bien en parafina o bien congeladas (a -80 grados).

"Habitualmente, tras el diagnóstico, hay un material biológico sobrante, que se deshecha. Este material tiene una importancia vital en el progreso de la medicina", señala el doctor José Luis Rey, del biobanco del Hospital Lucus Augusti.

Como entidades sin ánimo de lucro, los biobancos tienen protocolos para ceder gratuitamente (salvo gastos derivados de la logística de los envíos) muestras a investigadores, que deben justificar sus peticiones ante los comités científico y ético.

Así, en los últimos años, esos materiales han "viajado" por todo el mundo, y han sido claves en decenas de investigaciones. Por ejemplo, solo el biobanco de Vigo ha participado, desde 2013, en 80 proyectos nacionales e internacionales, y sus muestras han llegado a Estados Unidos o Canadá.

El próximo viernes, 6 de octubre, se presentará oficialmente la Rede Galega de Biobancos: esta iniciativa supondrá, a juicio de los expertos, un "salto cuantitativo y cualitativo" porque, aunque "no son reinos de taifas" y colaboran estrechamente, admiten que una plataforma como la Rede Galega les dará "una fortaleza impresionante". Así lo destaca el doctor Concha, quien admite que ese paso "facilitará" el crecimiento y la financiación de los biobancos.

Del mismo modo, el responsable del biobanco de Complexo Hospitalario Universitario de Santiago, Máximo Fraga, incide en que tendrán "más fuerza y presencia" en la Red Nacional de Biobancos, que coordina el Instituto de Salud Carlos III, y que se podrá difundir una "imagen de marca", más "tangible", de la que "sentirse orgullosos".

La mayor parte de la financiación de los biobancos gallegos procede de las convocatorias del Instituto Carlos III y esa circunstancia repercute directamente en uno de los aspectos que Fraga señala como crucial: "Necesitamos plantillas estables", sentencia Máximo Fraga.