La desaparición del vocalista de "A Roda" deja en suspense el futuro del popular grupo
La muerte del último de los fundadores en activo, "Fito", será un giro en la trayectoria de más de treinta años de la formación

Último adiós a la voz del tradicional grupo vigués. Por su voz profunda, poblada barba, su retranca e "inteligencia innata" recuerdan sus amigos a "Fito", o Adolfo Domínguez Otero, El que fuera calderero del naval y fundador y vocalista del mítico grupo "A Roda", falleció en su casa en Vigo y será despedido hoy por sus familiares y amigos en el barrio de Teis. El cantante del fue hallado muerto en el domicilio por su hijo Alfredo -que también forma parte de A Roda- solo unos días después del fallecimiento de su compañera Filomena Dourado. Fuentes próximas a la familia apuntaron a un fallo cardíaco como causa de la muerte. Jesús de Arcos
elena ocampo - Vigo
El grupo A Roda, insignia de la canción popular y la voz tabernaria forjada en los cánticos de mesa redonda del sector naval -de ahí su nombre-, afronta el reto de la continuidad tras la muerte de su líder, "Fito". Adolfo Domínguez Otero, fallecido el domingo en su domicilio de Vigo, era el último de los fundadores en activo y el cantante. Su profunda voz y barba se habían convertido en seña de identidad de la formación, cuyo primer disco fue grabado en octubre de 1977. Muchos de sus cánticos son también todo un clásico en el estadio Balaídos del Celta de Vigo. De hecho, una de las últimas actuaciones multitudinarias del grupo se produjo con el ascenso a primera.
"A voz de Fito é insustituible e absolutamente fundamental", explicó ayer desde Caracas Luis Vaamonde, que fue fundador y alma mater de A Roda junto a su hermano Suso Vaamonde. Mantuvo una gran relación de amistad con Fito que ha llegado hasta hoy. Pero para la trayectoria del grupo será necesario elegir un nuevo vocalista. Alfredo, hijo del desaparecido Fito y que también forma parte de A Roda en la actualidad está muy afectado por la desaparición de su padre que se produce pocos días después del fallecimiento de su madre Filomena Dourado -también integrante del grupo-. Él será parte fundamental en la decisión de continuidad. Las posibilidades que se plantean para la continuidad del grupo tienen que contar con el beneplácito de todos los miembros. De momento no han querido avanzar posibilidades.
Hoy a las cinco de la tarde habrá una misa en la capilla del tanatorio Vigomemorial por Adolfo Domínguez, donde será incinerado. Pero el funeral se celebrará a las siete en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de las Nieves.
¿Nuevo cantante?
Otras fuentes aseguran que "posiblemente A Roda non morra". Se baraja incluso la vuelta de un antiguo componente del grupo para dar voz a una gira en honor al finado. De momento, la decisión está en el aire. "A Roda nese momento era Fito, pola súa presenza, pola súa voz..." asegura el músico Alfonso Graña, que se crió en Teis con el fallecido y se integró también en alguna época. Destaca que "humanamente era impresionante; era una especie distinta". "Sen o seu liderazgo e a súa voz será difícil, aínda que pode haber algún cambio", reflexiona.
La formación había nacido en 1976 entre un grupo de amigos. La grabación de temas como Pousa, pousa, O andar miudiño y O gato extraídas de los ambientes de taberna como O Elixio, O Chavolas o A viúda, consiguió el Premio da Crítica galega en 1978. Entonces estaban los hermanos Luis y Suso Vaamonde, junto a José Luis Abalde y Pituco Abalde -ya fallecido-, Manuel Piña y los también hermanos Luis y Adolfo Domínguez, "Fito", junto a Keno Cabrera. Así lo recuerda Luis Vaamonde, sensiblemente emocionado por la noticia que le cogió por sorpresa de viaje. Aún tenían una comida pendiente.
A Roda aprovechó para grabar su primer disco una unidad móvil desplazada en Galicia de un sello musical. Y resultó un éxito de ventas. La discografía total del grupo -que vivió momentos sin grabación en los que programaron cientos de actuaciones en directo- se extiende en unos quince álbumes. En el segundo LP, titulado "Falemos galego" se incluían la conocida Foliada do Celta y Falemos galego. Posteriormente aparecería el tercer disco "Pra os amigos". Desde sus inicios vivió un ir y venir por los Centros Galegos en la emigración (Venezuela, México, Panamá, Argentina, Gran Bretaña, Bélgica...), donde gozó de reconocimiento.
La SGAE destaca la figura
La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) lamentó ayer el "fallecimiento inesperado" de "Fito" y, en un comunicado, pone de relieve su actividad en el ámbito de la música popular gallega. La SGAE explica que el artista, era miembro de la Sociedad desde 1992 y destaca de él que "contribuyó notablemente a la conservación y difusión del patrimonio musical popular de Galicia". "Con su característica voz grave, llevó sus adaptaciones del cancionero gallego a muchos rincones del mundo", señala la asociación, que también recuerda que "compuso piezas propias que son nuevos clásicos" como las canciones O can, Lévame. El grupo ha ideado o arreglado diversos temas para apoyar al equipo celeste como el Himno do Celta o Foliada do Celta. Desde la SGAE explican que "se unen al dolor de la familia".
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