La crisis inmobiliaria no es sólo exclusiva de España. Una casa congelada está convirtiéndose poco a poco en un icono en la ciudad de Detroit, en EE UU, gracias al fotógrafo Gregory Holm y al arquitecto Matthew Radune a los que han encargado congelar el edificio con un único propósito: denunciar y llamar la atención sobre la crisis inmobiliaria que vive el país.
Los artistas eligieron una vivienda de la periferia para llevar a cabo su original puesta en escena. Esta casa congelada será demolida en primavera y a cambio de este proyecto, sus dos creadores han acordado con las autoridades, que pagarán los impuestos atrasados de otra vivienda para que su propietaria puede vivir allí.
