Ha sido la última pero no la única. Otras dos mujeres gallegas se coronaron como Miss España antes que la joven coruñesa Estíbaliz Pereira. La primera en alcanzar el título fue una mujer republicana, Emilia Docet (Vigo, 1913) el 10 de febrero de 1933, y la segunda, la canguesa Olga Fernández, que fue coronada como la mujer más bella de España en 1975.

Emilia Docet, deportista y moderna, comprometida y galleguista, encarnó el ideal de mujer de la República, lo cual no le impidió competir en un concurso de belleza. Es más, al volver a Galicia con el título, que se había disputado en Madrid, fue objeto de homenajes de sus correligionarios galleguistas.

El más sonado fue el llevado a cabo el 16 de junio de 1933, en el hotel Miño de Ourense, al que asistieron los intelectuales de la época, desde Vicente Risco y Ramón Otero Pedrayo a Eduardo Blanco Amor y Álvaro Cunqueiro.

La prensa de entonces recogió felicitaciones como la del Centro Cultural Gallego de Barcelona “por haber sido elegida reina de la belleza”.

Con Bóveda y Castelao

Docet perteneció al Grupo Galeguista de Vigo y lo apoyó públicamente, lo que le granjeó la simpatía popular. Fue la única mujer que intervino en el famoso Mitin das Arengas, en la plaza de la Quintana de Santiago de Compostela, el 25 de julio de 1934, con motivo do Día de Galicia, junto a Alexandre Bóveda, Castelao y Ramón Otero Pedrayo, entre otros.

Era una gran deportista, hacía natación y remo. Practicaba en el Club Naútico Marítimo de A Coruña, donde enseñó a nadar a crawl -un estilo nuevo entonces- a sus compañeros y amigos en los primeros años de la República.

“Por esa época, con muy pocos medios pero con un entusiasmo desbordante, empezamos a nadar al estilo crawl que nos enseñó Docet, que lo había aprendido en no sé dónde. Fuimos los primeros nadadores de este estilo y también los primeros que empezamos a formar equipos de water-polo”, recordaba en una carta publicada por Faro de Vigo un antiguo compañero suyo, Darío Acuña Lagos.

Era una mujer comprometida con los problemas sociales. En una ocasión, se presentó ante el ministro de Agricultura republicano para que levantara el embargo a los siete mil campesinos que habían avalado un préstamo estatal para construir un matadero en Porriño.

De madre peruana, había estudiado peritaje mercantil en la Escuela de Comercio de Vigo.

Cuando fue proclamada Miss España -Señorita España, que en realidad era como se llamaba oficialmente- después de haber sido elegida Miss Galicia, el diario El Pueblo Gallego dio cuenta en portada, el 14 de mayo de 1933, del viaje que ese mismo día emprendía Emilia Docet a Madrid para participar en la elección de Miss Europa y de la cariñosa despedida que la víspera le habían dado amigos y deportistas.

La guerra civil se llevó por delante el popular concurso de belleza. En 1936 se suspendió la elección de Miss España y no se recuperó hasta los años sesenta. En la nueva etapa, los organizadores sustituyeron el título de Señorita España por el de Miss España y en 1975 se llevó el título otra gallega, Olga Fernández Pérez, que tuvo la poca fortuna de ser coronada en Tenerife el año en que se moría Franco.

Duelo

Pocas horas antes de la elección de Miss Mundo, el dictador pasaba a mejor vida. El luto tiñó a España de negro y, en señal de duelo, la gallega Olga Fernández, flamante Miss España, se tuvo que retirar de la competición como señal de respeto. Un año después, en 1976, participaba en los certámenes de Miss Europa y Miss Universo.