Ana Rumbao y Soledad Arenaza levantaron la agencia de publicidad La ballena que va llena en Vigo en 2007. "En Madrid vivimos los tiempos esplendorosos de la publicidad, cuando aún había grandes presupuestos, pero cuando decidimos instalarnos en Vigo la crisis ya estaba incipiente", recuerdan.

Las dos socias creativas destacan cómo la publicidad actual tiene que ser mucho más creativa que hace años para llegar a la gente. "Antes, los spots se podían poner muchas veces en televisión, por ejemplo, y la gente se quedaba con la idea a base de repetición. Hoy, por culpa de los menores presupuestos, la frecuencia en la que se va a ver tu anuncio es mucho menor y hay que conseguir, aún así, el mismo impacto".

Sus originales campañas se han ganado la confianza de clientes como Feiraco y Novagalicia Banco. "El sector financiero es uno de los más complicados en estos momentos y el objetivo de la publicidad es lograr que se ganen de nuevo la confianza del cliente", describe Ana. Para conseguirlo, estas profesionales apuestan por cambiar "la imagen seria y gris que tenía el banco por otra mucho más moderna y atractiva". Así lo han intentado con campañas como la saga "depósitos de cine".

Con otro tipo de productos y servicios, "el concepto por el que apuesta ahora más la publicidad es, sin duda, el precio. Antes se buscaban conceptos más abstractos pero ahora, sin perder los atributos de calidad, hay que competir por el precio". Las publicistas advierten de que el poder de la publicidad es limitado, "para que funcione, la persona tiene que estar predispuesta", apuntan. "Por ello la publicidad busca dirigirse cada vez a un público más segmentado", concluyen.