La dieta del atún se popularizó a través del culturista estadounidense Dave Draper. La dieta es muy estricta la primera semana y, a partir de entonces, se van añadiendo progresivamente otros alimentos.
La clave es que la proporción que regirá la dieta a continuación sigue esta máxima: 40% de proteínas, 30% de carbohidratos y 30% de grasas.
Los nutricionistas coinciden en que las dietas milagro son muy peligrosas para el organismo y que para someterse a un régimen alimenticio de forma eficaz lo más recomendable es que éste se realice acompañado de un profesional para no caer en un trastorno alimentario. También se ponen de acuerdo cuando opinan que ninguna dieta si no se mantiene en el tiempo es eficaz y éste es el motivo por el que aconsejan hacer pequeños cambios en el estilo de vida que se conviertan en un hábito.
Otro mandamiento para adelgazar y no recuperar el peso perdido es desterrar de la dieta tanto el azúcar como el alcohol. Estos dos productos, además de evitar el adelgazamiento, son peligrosos para la salud.
¿Cómo hacer la dieta del atún para perder 4 kg por semana?
Desayuno
- 1 lata de atún natural
- Rodajas de piña
- Lechuga
- Aceite de oliva
Comida
- 1 lata de atún (puede ser también una pechuga de pollo)
- Rodajas de melón o sandía (la cantidad que desees)
- Lechuga
- 3 cucharadas de aceite de oliva como aderezo de la ensalada
Cena
- 1 lata de atún en agua
- Rodajas de sandía o piña
- Verduras o lechuga
- 3 cucharadas de aceite de oliva como aderezo
Para hacer esta dieta de manera eficaz se deben beber dos litros de agua al día y ninguno de los alimentos que se ingieran debe ser procesado.
¿Es recomendable la dieta del atún?
Una dieta con demasiados alimentos no suele ser eficaz, como tampoco lo es tiene presente un único alimento a comer durante varios días puede tener consecuencias para la salud a medio y largo plazo. Al restringir tantos grupos de alimentos, es una dieta que puede acarrear muchas deficiencias nutricionales. El hecho de que no incluya apenas frutas y verduras el aporte de fibra es muy bajo, por lo que también lo será el de muchas vitaminas y minerales presentes en ellas.
El camino ideal para bajar de peso sería hacer un déficit calórico, es decir consumir menos calorías de las que gastamos. En cuanto a la alimentación para conseguir ese déficit, disminuiremos el consumo de cereales de alto índice glucémico, como las pastas, el pan o las harinas.
El consumo de productos de origen vegetal como frutas, verduras y legumbres, así como un buen aporte de proteínas bajas en grasa (pescado, carnes blancas, huevos, legumbres) en desayuno, comida y cena es saludable y ayuda a adelgazar.
