Con los votos de PSdeG-PSOE y el BNG y la oposición del PP, el pleno de la Diputación de Pontevedra aprobó la moción para exigir de la Xunta de Galicia que, ante el clamor social de padres y madres, Anpas, sindicatos, ayuntamientos, y de toda la comunidad educativa, se responsabilice de una vez de una competencia "exclusivísima" del Gobierno gallego como es el inicio del curso escolar que, en palabras del portavoz Carlos Font, "sigue sumido en un absoluto caos que deja a la sociedad en una indefensión intolerable y sin garantías; ni docentes ni sanitarias"
El portavoz socialista calificó de "fracaso estrepitoso de la Xunta de Galicia la lamentable rectificación de última hora, registrada a las 11.34 horas de hoy, cuando la Consellería tuvo que reconocer que no es posible comenzar el curso y certificaba el aplazamiento del mismo en Secundaria y Formación Profesional, tal y como le venían reclamando institutos de toda la provincia". Font acusó a la Xunta de actuar "tarde y mal" y de generar "una tensión innecesaria con todo el mundo", y todo para acabar admitiendo "el mismo que ya le habían pedido por escrito los centros, entre ellos hasta 12 directoras y directores de la ciudad de Pontevedra".
El portavoz socialista se refirió también al problema generado por el intento de la Xunta de cargar a los ayuntamientos con los gastos extraordinarios de desinfección, cuando el informe del secretario general de la Diputación y otros dictámenes de personas expertas, concluyen que se trata de una competencia exclusivamente autonómica, en la medida en que tiene que ver con la salud pública y excede claramente del deber de limpieza y mantenimiento comunes. "Resulta indignante, dijo Font, que el PP se ponga, también en la Diputación, del lado de la Xunta y no de los ayuntamientos", recalcó. Además, recordó que la institución provincial actuó de manera prematura enviando 1,7 millones de euros a los ayuntamientos para cubrir los gastos generados por la pandemia.
Críticas del PP
Por su parte, el portavoz del Partido Popular, Jorge Cubela, lamentó que ni PSOE ni BNG se pongan de lado de los ayuntamientos para reclamar al Gobierno que libere los remanentes de las entidades locales y entregue el fondo de 5 mil millones de euros sin limitaciones. Destacó que en el Congreso "ganaron los alcaldes, fue una victoria de todo el municipalismo, ante la incautación que el Gobierno central quería hacer de los más de 15 mil millones de euros de la caja de los ahorros de los ayuntamientos".
