La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba mantuvo esta mañana una videoconferencia con el Centro de Coordinación Operativo de la provincia para evaluar el cumplimiento de las nuevas medidas de desconfinamento vigentes en esta fase 1 del Plan para la transición hacia lo que el Ejecutivo ha denominado como la "nueva normalidad". Una reunión en la que se quiso lanzar un mensaje de que, aunque el comportamiento mayoritario de la población y hosteleros está siendo el correcto, tras los primeros días de tarea informativa, el control sobre el cumplimiento de las normas establecidas en las terrazas se va a endurecer e incluso se podría pasar a la sanción o al cierre en el caso de detectar incumplimientos graves y reiterrados, especialmente en lo que respecta a las normas que limitan el aforo en terrazas y veladores.

En el transcurso de la reunión, la subdelegada del Gobierno quiso evaluar la coordinación de acciones con los mandos policiales de Guardia Civil y Policía Nacional Provincial, junto a los responsables de los cuerpos de la Policía Local de las principales ciudades pontevedresas. De acuerdo al trabajo de vigilancia e información por parte de los cuerpos de seguridad del Estado, Maica Larriba quiso destacar que "el comportamiento de la ciudadanía en toda la provincia fue ejemplar, respetando las franjas horarias establecidas para diversas actividades en esta fase". Con todo, los resultados obtenidos en estos primeros días también advierten de la "actitud insolidaria de una minoría que ponen en riesgo a salud del resto de la población", indican de la Subdelegación. Se refieren,principalmente, a las imágenes que se pudieron ver especialmente a última hora de la tarde del lunes con algunas terrazas desbordadas en las principales ciudades de la provincia, entre ellas Pontevedra.

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Al respecto, la subdelegada del Gobierno manifestó que "lo ocurrido en algunas terrazas en nuestra provincia, con un incumplimiento de las mínimas medidas sanitarias, no se puede volver a repetir. Tenemos que ser conscientes que estas actitudes insolidarias y peligrosas pueden provocar un repunte del virus que nos lleve de nuevo a un confinamiento en nuestras casas".

Por este motivo, la Subdelegación anunció que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y las Policías Locales que a lo largo de estos primeros días mantuvieron una actitud informativa, "van a ser contundentes contra estas actitudes no colaborativas de una parte de la sociedad", indican. Maica Larriba quiso recordar que la enfermedad sigue ahí y "aunque pueda existir una falsa sensación de seguridad no es tal. Debemos ser conscientes y seguir respetando las directrices sanitarias que nos fijan unas franjas horarias para algunas actividades y ser lo más respetuosos sobre el distanciamiento social y el uso de máscaras cuando no se pueda respetar".

Finalmente, Larriba reconoció que "sé que pasamos casi dos meses en una situación nunca antes vivida en nuestro país y que los pontevedreses y pontevedresas cumplieron con las normas, pero la Fase 1 de la desescalada no significa que superáramos la pandemia. Como nos dicen los especialistas, la enfermedad no estará superada hasta que tengamos una vacuna". Por último la subdelegada subrayó que "solo con el compromiso individual de todos y cada uno de nosotros superaremos unidos esta situación" y concluyó recordando una frase dicha por el Delegado del Gobierno en Galicia: "hay que ir despacio para llegar antes".