El gobierno local de Pontevedra constituyó un comité de seguridad e higiene bajo la coordinación del director xeral de Recursos Humanos y con las concejalas de Personal y Réxime Interior y los jefes de los servicios municipales, para hacer frente a la pandemia.

Entre las primeras actuaciones implantadas por el Concello están la instalación de dispensadores de gel desinfectante en las dependencias municipales que reciben un mayor número de ciudadanos. También se intensificará la limpieza en todas las sedes municipales, incluidas las de las parroquias, como el consultorio de Ponte Sampaio.

El gobierno municipal también se ha puesto en contacto con todas las empresas concesionarias para coordinar protocolos de actuación frente al coronavirus.

En cuanto a la medida de no permitir concentraciones superiores a mil personas, el Concello ha decidido rebajar este tope a 800. Esa será la cantidad máxima de gente que pueda entrar a actividades como el Salón do Libro Infantil e Xuvenil. Se estudia implantar el teletrabajo entre los funcionarios del Concello.