La Policía Local de Poio en el año 2017 intervino en 145 casos con el fin de proteger a los animales domésticos.

El verano pasado, los agentes municipales llevaron a cabo una campaña de tenencia responsable de mascotas, con el objetivo de frenar los comportamientos incívicos. Las infracciones comunes son no llevar al animal con correa y bozal, o no recoger los excrementos de su mascota. Las infracciones de la ordenanza municipal acarrean multas que pueden oscilar entre 30 y 300 euros de cuantía, en función de la gravedad del hecho.

En total, en 2017 se realizaron 36 denuncias en relación a infracciones con perros potencialmente peligrosos, perros sueltos sin custodia que generan peligro en vía pública, cría y comercialización ilegal, no recoger excrementos, por falta de cuidados, y también se denunció en dos ocasiones por no recoger excrementos de caballo.

Resulta de vital importancia que las mascotas disponga de chip identificativo para que la Policía pueda pasar el lector y devolvérselo a sus propietarios, de lo contrario serán entregadas a la Canceira de Poio.