El Casino Mercantil recogerá ropa y calzado, así como juguetes, para las familias sin recursos de Pontevedra, tras llegar a un acuerdo con Cáritas Interparroquial. La sociedad instalará para ello un contendor de recogida de vestuario en le parque polideportivo de Cons, en Mourente.

La junta directiva explicó que el contenedor se instalará en breves días y "será también habilitado para los vecinos de la parroquia de Mourente que quieran participar y colaborar", independientemente de que sean socios o no del Casino Mercantil.

Por su parte, en la sede noble de la plaza de Curros Enríquez se instalará otro punto de recogida, pensado en este caso para los juguetes nuevos. La idea es "que ningún niño se quede sin recibir un regalo" esta Navidad, indican las mismas fuentes.

El Casino Mercantil anima a sus socios y también a sus familiares y amigos a sumarse a este proyecto solidario de ayuda a la infancia con menos recursos.

Cesión de espacios y albergue

El acuerdo de colaboración con Cáritas también contempla otras medidas como la cesión del salón de conferencias a la organización benéfica de la iglesia para aquellos actos con los que quiera dar a conocer su actividad y programación.

Por otra parte, Cáritas Interparroquial de Pontevedra inaugurará el próximo martes, día 12, el centro de día para transeúntes. La apertura consistirá en una bendición que oficiará el arzobispo de Santiago, Julián Barrio.

El centro atiende cientos de personas sin hogar, más de 300 en los 8 primeros meses del año en una veintena de plazas en las que los residentes pueden permanecer un máximo de medio mes; si bien por razones excepcionales este plazo puede ampliarse puntualmente. A mayores de esta instalación, las personas sin hogar pueden recibir atención en el albergue de Calor y Café y alimentarse en el comedor social de San Francisco.

El centro de Cáritas registra máximos de ocupación durante el invierno por parte mayoritariamente de los sin hogar gallegos, una parte personas con pocos recursos que se derivan desde centros sanitarios, servicios sociales; también foráneos que acuden a la ciudad en busca de trabajo. En todos los casos se exige el aseo y el cumplimiento de un horario: a las ocho menos diez de la tarde se sirve la cena y a las nueve y media se apagan las luces. Y también se madruga de modo que a primera hora el albergue esté vacío.

A mayores de este servicio de acogida que inició su andadura a principios de la década de los noventa, Cáritas dispone en Pontevedra de programas que incluyen viviendas de acogida, ropero, orientación jurídica y atención psicológica.