Cuatro concellos de la comarca de Pontevedra se encuentran, total o parcialmente, en las llamadas "zonas de sombra" del mapa de emergencias de Galicia. Se trata de los de Cerdedo-Cotobade, Ponte Caldelas, Campo Lameiro y A Lama. Son áreas a las que el servicio de emergencias de los parques de bomberos que tienen asignados tardan en llegar una media de 50 minutos.
Además, otros seis municipios de la comarca tienen que aguardar como mínimo 20 minutos para ser atendidos por los bomberos: Poio, Marín, Vilaboa, Barro, Cuntis y Moraña.
Así se desprende de un informe técnico encargado por la Diputación de Pontevedra para conocer la realidad de los concellos que dependen de alguno de los parques de bomberos del consorcio provincial -financiado al 50% por Xunta y Diputación-, que asegura que "existen zonas del territorio provincial con deficiencias severas en cuanto a cobertura de emergencias".
"Toda la franja central de la provincia, desde el norte al sur, abarcando un área delimitada por los concellos de Cerdedo y Campo Lameiro en el norte, hasta As Neves y Crecente en el sur, se encuentra en una isocrona de prestación del servicio con posibilidades de optimización", explican los técnicos en el texto. "El tiempo de respuesta a las emergencias en todo el interior de la provincia es manifiestamente mejorable, por lo que la creación de una red de parques que dé solución a esas zonas es un objetivo primodial para la prestación de un servicio eficaz de protección a las personas", añaden.
El cuerpo de bomberos provincial da servicio a 49 concellos de la provincia e incluye actuaciones de incendios, vertidos, explosiones, inundaciones, accidentes de circulación y rescates y salvamentos.
Especialmente llamativo es el tiempo de espera de los vecinos ante una situación de emergencia en el concello de Poio, que linda con el Parque de Bomberos municipal de Pontevedra, pero que, sin embargo, depende del provincial de Ribadumia. Esta coyuntura amplía lo que podría ser una espera de cinco minutos, en el caso de la parroquia de San Salvador, hasta casi media hora. Algo similar ocurre con el de Marín, municipio limítrofe con el de Pontevedra.
Esa espera media de entre 20 y 25 minutos también se da en Vilaboa y Barro, así como el algunas zonas de Cuntis. En este último municipio, así como en Moraña, en algunas ocasiones hay que aguardar una media de más de 25 minutos.
Pero, sin duda, los más perjudicados son concellos como Cotobade, Campo Lameiro, Ponte Caldelas o A Lama. Casi una hora tardan, según el informe de la Diputación provincial, en llegar los bomberos a determinadas zonas de estos municipios. Esto ha provocado que, por ejemplo en el de Cerdedo-Cotobade, los vecinos hayan iniciado una campaña de recogida de firmas que ya cuenta con más de 9.000 apoyos. Entre las demandas de los ciudadanos, así como de varios concellos, figura la comarcalización del Parque de Bomberos municipal de Pontevedra, para que les dé servicio.
El diputado de Economía, Carlos López Font, mostró ayer su indignación por la "inacción" de la Xunta al respecto y por su "impasibilidad ante la necesidad de elaborar un nuevo mapa de emergencias que permita dar respuesta adecuada a los incendios a la provincia a través de la eliminación de las zonas de sombra".
El pasado lunes del director xeral de Emerxencias de la Xunta, Luis Menor, reconocía en Pontevedra que el entorno de las ciudades es el "peor atendido" por el mapa actual.
Desde la Diputación se recuerda que ya el pasado mes de abril el organismo provincial propuso la comarcalización de todos los parques de bomberos para mejorar la atención a la ciudadanía.
