"Yo estaba ordenando el almacén abajo, así que cuando subí ya me encontré a la Policía acordonando la zona", asegura. La responsable de la tienda de moda femenina reconoce que en el margen de enfrente de los Soportales no sintieron miedo, pero, por si acaso, ese día regresó muy tarde a casa. "Cuando se cayó todo... nos dio mucha pena", manifiesta.
sara magariños