El futuro centro de día de Rexurdir Provincial se abrirá en el número 17 de la Rúa do Cruceiro, en la zona de A Barca. Así lo confirmaron ayer tanto el colectivo social como el Concello de Pontevedra, que se mostraron sorprendidos por la reacción de los vecinos del barrio y su protesta abierta a la ubicación de las instalaciones, en las que se ofrecerá atención a personas en riesgo de exclusión social del municipio.

Nunca imaginó Rexurdir Provincial que el nuevo local de su centro de atención social continuada iba a generar tanta polémica, hasta el punto de que se pusiese en marcha una campaña de recogida de firmas y pegada de carteles por parte de los vecinos del edificio que lo albergará.

"Estoy muy sorprendida por esta reacción, después de más de 20 años de actividad de la asociación, que nunca ha dado ningún problema", se lamentaba ayer a FARO la presidenta de Rexurdir, Ángeles Guisán. "Se ha creado mucho alboroto, como si esto fuese una amenaza social y no lo entiendo porque nunca ha tenido lugar ningún incidente", añadía.

Entre la sorpresa y el pesar, la responsable del colectivo se muestra dispuesta a reunirse con quien haga falta para explicar este proyecto, que ofrece ayuda a personas drogodependientes y otras en riesgo de exclusión social. "Nos conocen los socios, los voluntarios, los familiares de los usuarios, los vecinos... y saben que jamás ha habido ningún problema con Rexurdir, ni en el primer local que tuvimos en la calle General Martitegui, donde estuvimos siete años, ni en el que usamos actualmente, en la calle Cruz Vermella, que se nos ha quedado pequeño y obsoleto", explica.

Ángeles Guisán recuerda que las personas sin recursos y con adicciones "existen". "Están en la calle, duermen en cajeros... no podemos matarlos ni llevarlos a un monte a esconderlos. Hay que atenderlos, y para eso está el centro de atención continuada", informa.

La asociación también cuenta con un piso de reinserción social en la calle Echegaray. "Tampoco en este hubo nunca quejas de un solo vecino de ese edificio ni de los cercanos, por eso ahora no entendemos esta cerrazón", dice con pesar.

40 usuarios al día

Rexurdir Provincial atiende diariamente a unas 40 personas, aunque, según su presidenta, "es muy raro que coincidan en el centro más de cinco o siete, ya que es gente de paso". "Son personas que vienen a desayunar, a charlar, a buscar ropa, a desahogarse... Nosotros ya les conocemos, sabemos quiénes son, sus nombres y apellidos, Tenemos con ellos una relación de labor social, pero también una relación humana", considera.

La intención es que en el nuevo centro de O Cruceiro se pueda atender a unos 60 usuarios y disponer de más personal y un horario más amplio, para dar un mayor y mejor servicio.

"Cuentan con nuestro apoyo humano y profesional, ya que también reciben ayuda psicológica, humana y asesoramiento legal, con abogados", explica.

"Estamos manteniendo el local con mucho esfuerzo, pero esperamos poder meter más profesionales, que trabajarán mano a mano con los voluntarios", asegura.

El mensaje que Ángeles Guisán quiere transmitir a los vecinos de la zona donde se abrirá el nuevo centro es de tranquilidad: "El miedo es muy contagioso. Queremos que no tengan miedo a nada. Si tienen miedo, yo se lo quito explicándoles nuestro trabajo. Actuamos con total transparencia y nos avalan casi 30 años sin ningún conflicto y con el apoyo de la Xunta y el Concello".

Por ello, se muestra dispuesta a participar en la reunión que la concelleira de Benestar Social, Carmen Fouces, mantendrá con los vecinos. "Encontramos este local que reúne las condiciones, pero eso no quiere decir que vayamos a estar siempre aquí. Ya antes hemos pasado por otros que finalmente se nos quedaron pequeños", apunta la presidenta de Rexurdir Provincial.

Además, la asociación de ayuda al toxicómano cuenta con una cuenta abierta en la página web solidaria migranodearena.org en la que pide ayuda para levantar su centro de atención social continuada a través de donativos. El objetivo es conseguir 13.000 euros, según la iniciativa, puesta en marcha a finales del pasado mes de agosto.

El local contará con aseos y duchas adaptadas, servicio de cocina y lavandería, servicio de ropero, salas de estar y despachos para asesoramiento legal y aulas, entre otros.