La Policía Nacional necesitará varias jornadas para completar su investigación en torno al incendio que calcinó por completo un edificio en el casco histórico de Pontevedra y que tiene como objetivo arrojar luz sobre dos cuestiones fundamentales: Cuál fue el foco del incendio y la causa del mismo. Los expertos de la Comisaría General de la Policía Científica de Madrid, la elite de los "CSI" españoles, realizaron ayer una primera visita a las ruinas del edificio. Una inspección ocular en la que constataron el elevado nivel de destrucción que dejó el incendio de tal forma que hay zonas en las que hasta tres pisos del inmueble colapsaron creando varias capas que ahora deberán ser retiradas de forma minuciosa.
Así las cosas, fuentes de la Comisaría provincial confirmaron ayer que, ante esta situación, han decidido detener la inspección y retomarla el martes para poder afrontar con las mayores garantías la ardua labor de "desescombro selectivo" del inmueble que se realizará para intentar dar con las causas y el origen del incendio. El equipo estará compuesto por agentes de la Brigada Provincial de la Policía Científica junto a estos compañeros llegados desde la Comisaría General de Madrid.
Al mismo tiempo, los investigadores de las empresas especializadas contratadas por las aseguradoras esperan formar parte de este equipo de investigación bajo la coordinación de la Policía Científica.
Necesario apuntalar
Ayer estos investigadores explicaron el proceso que habitualmente siguen al enfrentarse a escenarios tan complejos como éste. En primer lugar, se realiza esta primera toma de contacto con el lugar del siniestro. Una de las claves es, antes de iniciar las labores de desescombro, garantizar la seguridad del inmueble. Es por ello que con toda probabilidad será necesario realizar labores de apuntalamiento. En este caso contarán también con los informes que está elaborando en estos momentos el Concello de Pontevedra sobre la seguridad en el edificio y que debe autorizar estas labores de retirada de material del edificio, así como su apuntalamiento.
Una vez garantizada la seguridad, el segundo paso consistiría en el inicio de las labores de retirada de desperdicios propiamente dicha. Deberá hacerse de forma minuciosa y buscando "las marcas de fuego" y otras pistas que permitan conocer donde se iniciaron las llamas y como se propagaron.
Para realizar estas labores de desescombrado selectivo será necesario, probablemente, contar con el apoyo de algún tipo de maquinaria y apoyo técnico externo, según indicaba ayer un experto en el análisis de este tipo de siniestros.
Con la retirada de los escombros y tras el análisis de estas marcas de fuego, este experto cree que pese al elevado grado de destrucción del edificio se podrá determinar el lugar en el que se originó el incendio. De hecho, señalan que ya ahora centran sus sospechas sobre una zona de unos 20 metros cuadrados en la parte central del inmueble, en un punto en el que debido a los destrozos causados por el fuego, resulta difícil establecer los límites entre las distintas dependencias que existían en el edificio o si pertenecían a los locales que daban a A Ferrería o a Michelena o a ninguno de ellos.
Es por ello que además de ese trabajo de campo habrá que realizar también un minucioso estudio de los planos del inmueble. En esta investigación también se tendrá muy en cuenta el relato de los testigos que presenciaron el incendio y, de hecho, los policías científicos contaron ayer con el apoyo de los bomberos de Pontevedra que participaron en las labores de extinción, quienes les explicaron los pormenores de aquel operativo de urgencia.
Los Bomberos como los agentes de la Brigada de la Policía Científica ya realizaron diversas averiguaciones en el mismo edificio en los días posteriores al siniestro y también los expertos de empresas privadas contratados por las compañías de seguros pudieron entrar al edificio. Tras esta primera visita y en base a la información preliminar siguen apuntando a que algún fallo en el sistema eléctrico pudo ser el desencadenante del fuego, pero no tienen todavía ninguna prueba definitiva a este respecto.
Este será el siguiente paso a dar en cuanto logren focalizar el origen del fuego. En ese mismo momento tratarán de buscar alguna fuente de ignición y (de no conservarse debido a la destrucción del inmueble) tratarán de buscarla en los planos o plantearán posibles hipótesis sobre el origen de las llamas. En cualquier caso, tanto estos investigadores privados como desde la propia Comisaría se destaca que este trabajo va para largo.
