Emilio Clavo Lumbreras, de Clavo Congelados, con sede en Caldas de Reis, recibió ayer el Premio Honorífico de la AJE.

La proyección de un divertido vídeo sirvió para hacer un repaso por la trayectoria de la empresa. Tras las imágenes, el propio Clavo intervino para asegurar que el reclamo de cualquier marca "debe ser un reflejo de cómo somos".

"Mi mensaje es el de la fuerza del equipo. Vosotros seréis líderes en vuestras empresas, en vuestras familias y en vuestras casas", dijo dirigiéndose a los jóvenes empresarios, para añadir que "es una responsabilidad tremenda que hay que trabajar día a día".

"Humildad, ética y ejemplo son los pilares. Yo los he intentado llevar a cabo cada día. Este premio no es más que el reconocimiento a todos los que lo apoyaron desde sus inicios", aseveró.

Clavo Congelados, creada hace treinta años, es una empresa de carácter familiar que cuenta en la actualidad con más de 400 trabajadores y factura cada año más de 35 millones de euros.