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Uno de los agentes que multó giros de cabeza se reincorpora tras más de un mes de baja

El policía local de Poio ha mantenido que sus polémicas sanciones se ajustan al reglamento

Después de más de un mes de baja, uno de los dos agentes que multaron a 13 conductores por girar la cabeza más de 45 grados vuelve a patrullar el municipio. Este policía se acaba de reincorporar al cuerpo una vez completada la recuperación de un accidente que sufrió junto a este mismo compañero en acto de servicio, siguiendo este último en reposo. Tanto uno como otro han mantenido en conversaciones telefónicas con sus superiores y también por escrito que sus controvertidas sanciones se ajustan al reglamento.

El agente que regresa al cuerpo municipal no ha apuntado más detalles sobre lo ocurrido, según han expuesto desde el gobierno local. En cualquier caso, la versión que mantienen ambos policías sobre su correcto modo de actuar se evaluará junto con informes que el Concello ha pedido a diversas administraciones. El gobierno optó por abrir una comisión de investigación que aclarase los hechos. Para ello se solicitaron esos documentos de carácter interpretativo para determinar sin ambos policías habían obrado de manera adecuada o si, por el contrario, lo hicieron con exceso de celo.

Esta investigación municipal para aclarar estas multas sigue pendiente de recibir aún algunos de los informes solicitados. Cuenta, eso sí, con el escrito de los dos agentes implicados. Ambos policías han insistido en el que consideran un correcto y honesto proceder. Así se lo han trasladado al gobierno local, como también lo habían hecho ante el jefe del cuerpo de seguridad.

La polémica que se analiza saltó a la luz pública cuando los automovilistas sancionados empezaron a recibir en sus domicilios las cuestionadas multas. Todas, 13 en total, lo eran por el mismo motivo: girar el cuello más de 45 grados. Además también compartían lugar y fecha. Los dos agentes multaron a estos conductores en Porteliña, donde estaba emplazado un radar móvil, en un período inferior a la media hora. De media impusieron una sanción prácticamente cada dos minutos en la tarde de la festividad del Viernes Santo, el 18 de abril.

En la lista de afectados aparecieron vecinos de Poio, Vigo o Madrid. Algunos apuntaron en su momento que pagarían para beneficiarse del pronto pago y reducir el desembolso de 100 a 50 euros. Otros, en cambio, anunciaron que reclamarían para dejar constancia de esta "injusticia". El alcalde reconoció que si la comisión de investigación concluye que las multas son antirreglamentarias, los automovilistas que hayan pagado las sanciones recuperarían su dinero.

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