Un hombre aceptó ayer en el Juzgado de lo Penal 1 una condena de un año de prisión y 62 días de trabajos en beneficio de la comunidad por los delitos de atentado contra agentes de la autoridad, conducción temeraria y circular sin permiso de conducir. Además, estará privado del carné durante un año y un día.

Es la misma situación en la que se encontraba el 4 de enero de 2018, cuando dos agentes de policía se acercaron al vehículo en el que se encontraba parado en el barrio de Eiroás. Tenía el permiso retirado desde el 20 de enero de 2017, y al ver a los agentes, uno a cada lado, reaccionó iniciando la marcha atrás. Al intentar detenerle uno de los policías, le propinó varios puñetazos tirándolo al suelo. Arrancó de nuevo y, tras chocar contra un cierre, golpeó con la aleta derecha al otro agente. En la huida circuló sin luces, a gran velocidad, en alguna ocasión por el carril izquierdo y saltándose un stop. En este alocado trayecto que le llevó hasta Cambeo hizo caso omiso a las indicaciones acústicas y lumínicas, y puso en riesgo al resto de conductores.