Óscar N. J. se fundió en un abrazo sentido con su madre al finalizar el juicio en el que ayer se conformó con 2 años y 8 meses de cárcel por un intento de robo violento en una casa de Avión, donde llegó a golpear al propietario con el palo de una escoba después de ser sorprendido, tratando además de atropellarlo marcha atrás con su furgoneta, antes de darse a la fuga. El encausado fue trasladado ayer al juzgado desde la penitenciaría de Pereiro -ha cumplido una cuarta parte de la condena en prisión preventiva-, y la juez permitió que madre e hijo se saludasen y abrazasen al finalizar la vista que ratificó la condena de conformidad. La titular del Penal 1 apeló al sufrimiento de la progenitora por tenerlo lejos para persuadir al encausado de que no delinca más: "Bastantes disgustos le ha dado ya a su madre, no robe más. No quiero volver a verlo por este juzgado. A ver si hace caso esta vez, espero que lo tenga claro", dijo la juez con insistencia. "Sí, señoría", contestó unas veces, asintiendo otras para dar a entender que ha aprendido.

Se enfrentaba inicialmente a una petición de condena por parte de la Fiscalía de 3 años y 6 meses. La pena se rebaja por el acuerdo de conformidad y teniendo en cuenta que el robo violento no llegó a consumarse. La defensa pide que se le suspenda la pena, una vez que ha cumplido ya 8 meses en prisión preventiva y el encausado está desintoxicándose de las drogas. Esta versión tendrá que probarse con informes en la fase de la ejecución de la condena. El ministerio público esperará a lo que dictaminen los expertos para resolver si apoya la suspensión, o no.

Sí quedó claro en la vista de conformidad que el atracador confeso no pagará los 90 euros de multa impuesta por el delito leve de lesiones que infligió a la víctima. El hombre es insolvente y quiere que se le sustituya el pago por 15 días de trabajos en beneficio de la comunidad, una pena que podrá desempeñar en la propia prisión. La condena incluye otros 300 euros en concepto de responsabilidad civil.

Óscar N. J. ya fue condenado en firme en 2013 por un delito de robo con fuerza. Con la conformidad prestada ayer reconoce que el 13 de junio de 2017, entró en una casa de Amiudal (Avión), sobre las 14.45 horas, aprovechando que la puerta estaba abierta. Se dirigió al dormitorio y allí fue sorprendido por el propietario. Este le recriminó su actitud, pero el acusado le exigió dinero y se abalanzó sobre él, cayendo los dos al suelo.

Óscar consiguió levantarse para escapar. Antes de salir del domicilio, y tras coger un palo de escoba que se encontraba en la vivienda, se encaró de nuevo con el dueño y lo golpeó en la cabeza, tirándolo de nuevo al suelo.

El delincuente tenía aparcada su furgoneta en las inmediaciones de la vivienda. Cuando ya se disponía a darse a la fuga del lugar, el encausado dio marcha atrás con el vehículo para intentar atropellar al denunciante, como se considera probado tras al acuerdo de conformidad entre Fiscalía y defensa.

Como consecuencia del intento de robo violento, el perjudicado sufrió contusiones en el cráneo y el tórax. Recibió una asistencia médica. Las lesiones tardaron en curar 10 días. Por estos hechos que ayer aceptó, Óscar N. J. permanece en prisión preventiva desde el 23 de junio de 2017, un auto que fue posteriormente ratificado por otro juzgado de instrucción.