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Un reparo del interventor vuelve a retrasar el concurso para renovar la red semafórica

El precio de la licitación subirá de 540.000 a 900.000 euros al año, debido a las nuevas exigencias tecnológicas, y el funcionario solicita un informe que justifique el incremento

Técnicos realizando una puesta a punto de los semáforos. // Iñaki Osorio

Un reparo del interventor municipal vuelve a retrasar la salida a concurso del servicio de mantenimiento de la red semafórica de la ciudad, un servicio ahora en precario, al haber caducado hace dos años la concesión a Sice. A la vista de las innovaciones tecnológicas que hay que introducir en la nueva red para adaptarse a las demandas actuales de control de tráfico, el precio de salida del concurso estaba previsto en los pliegos técnicos en unos 900.000 euros anuales aproximadamente, frente a los 540.000 euros de la concesión actual.

Según el concejal de Tráfico y Seguridad Ciudadana, Carlos Campos, "el interventor pidió un informe más pormenorizado de los motivos y destino de ese incremento en el precio del servicio, por lo que hubo que pedir un nuevo estudio a la intendente de la Policía Local, que ya está realizado y entregado, y ahora toca volver a esperar el informe, porque el interventor va estudiando todo lo que le llega por orden de entrada; vamos que ya no quiero poner fecha. El tema burocrático es así de complejo en la administración", lamenta el concejal.

Iba para septiembre

De hecho Carlos Campos se mostraba optimista meses atrás, en el sentido de poder sacar a concurso esta necesaria renovación del concurso de mantenimiento de la red semafórica en septiembre y poder tener cerrada la adjudicaciones mismo año.

El precio subió porque Sice -actual concesionaria- está llevando ya hace más de dos años el servicio en precario, al caducar la adjudicación, "y nuestra intención es introducir las últimas mejoras; de hecho ya están incluidas en el pliego las exigencias que tendrán que cumplir las empresas", advierte.

Una de esas exigencias es precisamente la dotación de los llamado "semáforos de botón rojo", según ya había avanzado el propio concejal que fotografiarán las matrículas de los coches que excedan la velocidad permitida en el casco urbano o pasen el semáforo en rojo, con lo que la sanción está asegurada.

Cámaras

Estos semáforos incorporan cámaras que en una primera fase serán dos o tres como máximo, por lo que la idea del Concello es irlos instalando en su momento, cuando esté adjudicado el futuro servicio, de forma itinerante, sobre todo en aquellas vías urbanas donde está comprobado que se excede de forma habitual el máximo de velocidad permitida, como ocurre con Pardo Bazán y avenida Marín, entre otras.

Otros aspectos que según señaló en su momento el concejal podrían retrasar la salida a concurso del servicio de mantenimiento de la red semafórica son las reclamaciones de Sice. Esta empresa lleva el servicio desde hace 12 años en base a nuevos contratos que fueron renovándole, pero según ya había señalado el concejal el precio del contrato está desfasado. A criterio de la firma no incluye las nuevos compromisos que tuvo que asumir y la ampliación de calles y barrios con grupos semafóricos.

Pedían por lo tanto un plus anual por cada año que ha realizado cometidos por encima de los de su contrato, algo que también estuvieron analizando los jurídicos del concello para ver si hay sobreprecios en sus peticiones.

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