El nuevo edificio judicial de Ourense, que se construirá en una parcela ubicada en el barrio de O Couto, entrará en funcionamiento dentro de tres años, después de que el conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, Alfonso Rueda, anunciase ayer que "estará listo en un horizonte máximo de 2013", después de que en el primer trimestre de 2010 se proceda a la adjudicación de las obras.

También subrayó durante la presentación de la maqueta de la nueva infraestructura, en la que estuvo presente el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, y el presidente de la Diputación, José Luis Baltar, que se trata de un edificio de los más "punteros" de España, que albergará 20 juzgados, una planta para la Fiscalía, 14 salas de vistas, una sala de bodas y un archivo situado en el sótano del edificio.

Pero en lo que hizo especial hincapié Alfonso Rueda es que el nuevo edificio judicial de Ourense prevé futuras ampliaciones, teniendo en cuenta la creación de nuevos juzgados, fijando la previsión inicial en cuatro nuevos juzgados, aunque no descarta que puedan ser más.

En cuanto a la inversión, el conselleiro de Presidencia confirmó que será de 15 millones de euros, contemplada en el Plan de Infraestructuras Judiciales de la Xunta. Sobre está cuestión, Rueda aseguró que "es muy importante lo que se está haciendo en Ourense con el tema de los terrenos".

Colaboración

Rueda añadió que desde que se aprobó el plan de infraestructuras, "y conseguimos los 100 millones de euros para la construcción de edificios en toda Galicia", se está en contacto con los alcaldes de Vigo, Pontevedra, A Coruña y Ourense, ya que son las cuatro ciudades en las que se tiene previsto hacer grandes infraestructuras, y fue el de Ourense el que por el momento ha puesto los terrenos a disposición de la Xunta.

"El dinero está y ahora se están dando los pasos para la construcción del edificio. Hay una buena colaboración con el Concello de Ourense, y eso se debe remarcar", recalcó el conselleiro de Presidencia.

En esa misma línea se pronunció el alcalde Francisco Rodríguez, que manifestó el "alto nivel de entendimiento" que sobre esta infraestructura existió desde el primer momento entre el Concello y la consellería, lo que propició que el nuevo edificio judicial de Ourense "se pueda construir cuanto antes".

También aludió a que se trata de un proyecto que va más allá de cubrir las necesidades que existen en la administración de justicia, ya que se convertirá en un "elemento reurbanizador" en una de las zonas con mayor población de la ciudad.

De ahí que los ganadores del concurso de ideas, los arquitectos Cristina Lago y Pablo Fidalgo subrayaron que el diseño del edifico se sustenta en el concepto de "cercanía", además de ser "compacto y optimizado de superficie".