Las familias con hijos con parálisis cerebral llevan seis meses sin recibir el tratamiento de fisioterapia que recibían por la Seguridad Social, desde que en marzo se suspendieran estas terapias por la pandemia y ante el estado de alarma decretado por el Gobierno central. Ante el malestar mostrado por las familias en esta situación de O Morrazo, que este mismo mes organizaron una protesta en Moaña, el gobierno local de esta villa reaccionó consensuando con ellas una moción que se presentará al pleno de la corporación del próximo jueves.

Así, los grupos de BNG y PSOE esperan encontrar el consenso del todos los ediles para instar a la Consellería de Sanidade a que "de forma inmediata" reanude el servicio de fisioterapia y las diferentes terapias que se venían prestando a las personas usuarias del centro San Rafael de Vigo, garantizando el cumplimiento de las medidas preventivas del Covid-19 que sean preceptivas.

Asimismo, se reclama que Sanidade amplíe este servicio no solo al tiempo de las sesiones, sino que se mantengan las terapias a las personas afectadas mientras las precisen, ya que las consideran importantes para mantener la "calidad de vida" de las personas con parálisis. Se piden garantías de la continuidad del servicio durante todo el año pidiendo para ello que el personal terapeuta sea sustituido en sus turnos de vacaciones o durante las bajas por enfermedad.

A mayores, se pide a la Xunta que abra el local moañés de fisioterapia por las tardes para centralizar en la villa esta atención terapéutica, evitando así el desplazamiento innecesario de las familias de Cangas y Moaña hasta Vigo.

Finalmente, la moción reclama que Sanidade considere prioritario este tipo de servicios terapéuticos a las personas con necesidades especiales, al entender que "son las más vulnerables y las que necesitan de una atención diferenciada y continuada". Se pide que la pandemia no suspenda este tipo de "medidas excepcionales".

En la protesta convocada a comienzos de mes en Moaña, las familias aseguraron no entender por qué las terapias siguen paralizadas mientras comienzan las clases "y meten a 25 niños en las aulas". Entienden que si se pueden establecer medidas de seguridad para los colegios, también hay cabida para prestar en seguridad estos tratamientos de fisioterapia.

El 30 de julio ya se habían concentrado también en Cangas las familias de O Morrazo que usan este servicio. Hace años acudían al antiguo Hospital Xeral pero, después de su cierre, se les desplazó a las instalaciones del colegio San Rafael.

Al igual que se pide en la moción que se someterá a votación el jueves en Moaña, las familias que se concentraron piden también que el servicio, además de retomarse, se vaya acercando a los municipios con una posibilidad de tenerlo en O Morrazo, evitando así el gasto en tiempo y dinero que implican los desplazamientos continuos a Vigo.

No son pocas las familias de la comarca que han tenido que recurrir, desde el final de la desescalada, a clínicas privadas para la fisioterapia de sus hijos con parálisis cerebral. Alegan que las sesiones de esta forma no bajan de los 30 euros.