Cangas, Moaña y Bueu ya han recorrido parte del camino hacia el aprovechamiento de sus residuos orgánicos para hacer compost. Según los datos de la Mancomunidade entre los tres concellos hay ya un total de 140 composteros comunitarios, entre los que están en funcionamiento y aquellos que están proyectados o incluso licitados, una cifra nada desdeñable que pretende ampliarse de forma exponencial en los próximos años.

Moaña está a la cabeza en cuanto a cifras, ya que entre los composteros actualmente en uso y aquellos que tiene licitados alcanza los 70. Cangas dispone en la actualidad de 18 pero ya ha sentado las bases para instalar otros 22. Y Bueu cuenta con una docena, pero planes para incorporar otros 18.

A estos composteros colectivos se han unido en los últimos años composteros individuales repartidos entre la población de forma periódica, y se pretende llegar a final de año a los cerca de 1.400. En Moaña se han repartido por el momento 244 y hay licitados otros 229, además de estar pendientes de un centenar más a través de una subvención. Cangas ha repartido 57 y Bueu 150, siempre según los datos aportados por la Mancomunidade. Otro de los elementos clave en el proceso son las jaulas de restos vegetales, que luego se tratan para servir de compactante de la materia orgánica en la realización de compost. Moaña tiene cuatro y licitará en breve dos más y Cangas cuenta con cinco.