El fuego volvió a protagonizar una situación de riesgo ayer en Moaña. El número de incendios en los últimos tiempos es muy elevado en el municipio. El de ayer tuvo lugar en un astillero de la zona industrial de A Guía, en Meira, y tanto la virulencia de las llamas en sus primeros compases como el intenso y negro humo que generaron fueron visibles en toda la ensenada de Moaña, alertando incluso a los vecinos del centro urbano. Por suerte, los bomberos lograron sofocar las llamas sin que causasen destrozos importantes en el propio astillero y no se registraron daños físicos de ningún tipo entre los trabajadores.

El incendio se decretó antes de las once y media de la mañana de ayer. El fuego se originó en un yate de recreo que estaba en reparación en este astillero, concretamente en un lateral de la nave, a cielo abierto. La empresa afectada fue Industrias Navales A Xunqueira. Sus responsables desconocían ayer las causas del fuego y explicaron que efectivamente se originó en la embarcación de recreo unos 12 metros de eslora, que tras una reparación estaba lista para su entrega y que finalmente quedó calcinada y sin posibilidad de recuperación.

Los primeros en llegar a la zona fueron los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil. Sobre las 11.40 horas se desplegaron en la zona tres camiones con bomba de agua de los Bombeiros do Morrazo, con cuatro efectivos. Fueron ayudados en todo momento por el personal del astillero, y trabajadores de Aqualia colaboraron también en la captación de agua para las labores de extinción. La virulencia inicial del fuego hizo que fuesen advertidos también los bomberos del puesto de O Porriño, aunque no llegaron a desplegarse sobre el terreno al controlar de forma rápida el fuego los efectivos locales.

La prioridad inicial de los bomberos fue evitar que las llamas pasaran del yate a un gran draga con 53 metros de eslora que se levantaba justo al lado, también sometida a tareas de reparación. En un primer momento las llamas escalaron por este buque, quemando las ruedas de defensa del casco e incluso un rollo de cuerda en su interior. Sin embargo los bomberos lograron impedir más daños en esta draga y, aprovechando su altura, rociaron durante toda la mañana el yate quemado y todo su entorno. La presencia de elementos como colchones o maderas dificultó la extinción total del fuego y exigió el continuo refresco del barco quemado para evitar rebrotes en las llamas. Sobre las 12.15 horas el fuego estaba ya controlado sin que hubiese que lamentar heridos y con el astillero salvado.

Hasta la zona se desplazó también la alcaldesa, Leticia Santos, que urgió la presencia de Salvamento Marítimo para controlar los posibles vertidos en la ría que se derivarían de la extinción con agua del fuego que afectó a elementos contaminantes como poliéster o pintura.

Más casos

El de ayer fue el segundo incendio urbano en Moaña desde el inicio del estado de alarma, tras el que arrasó la cubierta de una vivienda en Abelendo. Es además el quinto siniestro de este tipo desde el mes de noviembre tanto en viviendas como en centros de trabajos En todos estos sucesos se registraron dos heridos y no hubo que lamentar víctimas.