La caravana multicolor del carnaval de O Hío saió de Vilariño no más allá de las 12.00 horas. Como es tradicional se concentraron en esta aldea todos los gaiteiros de las siete aldeas que participan en este entrodio, al que ayer se le sumó el buen tiempo. El paso por la carretera EP-1004 fue lento y el sonido de las gaitas y los tambores ayudaron a subir la pronunciada cuesta que llega hasta Iglesario. Primera parada de esta caravana llena de juerga, simpatía y apta para todos los públicos, al menos en jornada matutina.

Cerca de 2.000 personas disfrazadas de mil maneras llegaron al Iglesario, donde los gaiteiros de la aldea entraron en primer lugar y fueron los primeros en subir al palco. Allí, los grupos de gaiteiros de cada parroquia, tocaron dos piezas, mientras las máscaras y comparsas buscaban sitio para prepararse a reponer fuerzas. Era el primer gran avituallamiento. Ya en PInténs, los participantes alcanzaban las 5.000 y se esperaba que en Vilanova se alcanzara la cifra de 7.000, según señalaba Protección Civil que cerraraba la caravana, a modo de coche escoba y atendiendo a cualquier incidencia.