La Guardia Civil detuvo en la madrugada del jueves a dos vecinos de Cangas como presuntos autores de varios robos en locales comerciales durante los últimos meses. Los sospechosos fueron puestos a disposición judicial, decretándose su puesta en libertad. Lo curioso es que uno de ellos volvió a ser detenido esta misma madrugada tras ser sorprendido robando en el interior de una floristería de la calle San José. La detención la efectuó la Policía Local, que a continuación dejó al hombre bajo la custodia de la Guardia Civil de Cangas.

La primera detención tuvo lugar alrededor de las 1.30 horas del jueves. Uno de los arrestados fue sorprendido in fraganti en el interior de una panadería, mientras el otro ejercía labores de vigilancia en el exterior del establecimiento. El arresto tuvo lugar en el marco de un operativo conjunto entre Guardia Civil y Policía Local de Cangas después de que en los últimos meses se registrasen varios robos en establecimientos comerciales del municipio. Ese dispositivo permitió localizar en la madrugada del jueves a dos personas sospechosas cuando transitaban por el casco histórico de Cangas. Uno fue sorprendido dentro de una panadería, que ya había sufrido un robo el pasado día 6 de febrero, mientras que el otro estaba en el exterior ejerciendo funciones de vigilancia.

En el momento de la detención se les intervino una mochila en la que portaban las herramientas que empleaban para cometer los robos: una navaja, dos destornilladores, un gorro de tela de color negro, unos guantes y una linterna. También se les incautó una bicicleta que empleaban para sus desplazamientos.

Los detenidos son dos vecinos de Cangas, de 50 y 34 años de edad y con un amplio historial de antecedentes policiales, con más de medio centenar de delitos entre ambos. La Guardia Civil les atribuye al menos cuatro robos consumados y una tentativa en distintos locales comerciales. La operación continúa abierta para determinar la posible implicación de los detenidos en al menos otros ocho robos en comercios cangueses.

A esa lista hay que sumar ya un posible delito más. Uno de los arrestados, J.J.P.R., fue detenido esta misma noche cuando salía de una floristería cercana al cementerio de Cangas. La Policía Local recibió el aviso de un vecino que lo vio y cuando llegó al lugar interceptó al hombre, que llevaba más de 100 euros, que era el cambio que había en la caja registradora del establecimiento. La patrulla lo puso a disposición de la Guardia Civil para su interrogatorio, custodia y posterior entrega en el juzgado.