El acuerdo entre Portos de Galicia y el Concello de Moaña para que este último construya el último tramo del paseo marítimo de Domaio se dilata cada vez más en el tiempo. El pasado 16 de mayo el organismo de la Xunta envió al Concello el convenio, después de 13 meses de desavenencias. Pero desde entonces todavía no ha sido remitido nuevamente a Portos desde el gobierno local debidamente firmado. El retraso está siendo denunciado por el PP local en las últimas semanas, que teme problemas para financiar esta actuación.

Según ha podido saber FARO, el Concello, tras recibir la propuesta de convenio, se lo entregó a los técnicos para su análisis antes de su firma, que remitieron un escrito a Portos de Galicia solicitando modificaciones en alguna de las cláusulas. Una de estas modificaciones es la del tiempo de uso como paseo que se debe garantizar en un convenio que se prolongará durante 15 años. La propuesta incial de la Xunta no incluye plazo para garantizar que se mantiene el espacio como una zona peatonal, y el Concello exige al menos 5 años.

El bipartito pretende finalizar el paseo construido inicialmente por la Autoridad Portuaria con 100.000 euros comprometidos por la Diputación.

El proyecto a ejecutar contempla la construcción de 200 metros de paseo, entre el club de jubilados y el muelle. Completará las dos primeras fases ejecutadas por la Autoridad Portuaria de Vigo hasta 2013. La obra incluye habilitar una zona paralela a la línea de costa del paseo y otra de aparcamiento con capacidad para 50 plazas.

El último añadido, por su parte, incluye un paso de peatones de cinco metros de largo, con bandas transversales de 50 centímetros, en disminución cara el norte, que se enfrenta al acceso de vehículos hacia el club de jubilados. Este paso de peatones partirá del final del paseo marítimo y lo conectará con la otra parte del añadido: una zona peatonal preferente.