El corte de suministro eléctrico de domingo, en las parroquias de O Hío y Aldán, afectó a 3.700 clientes y se debió a dos incidencias que tuvieron lugar de forma simultánea. La primera se debió a una avería en el transformador aéreo de As Barreiras, en Liméns y la segunda en una conexión de paso aéreo a subterráneo. Las dos incidencias se produjeron prácticamente al mismo tiempo, lo que complicó todavía más la reparación de la línea. La empresa Energy afirma que lo que escucharon los vecinos de As Barreiras no fue exactamente una explosión, sino un ruido al fundirse los fusibles que tiene el aparato. También apunta que hasta allí desplazó un grupo electrógeno para atender a las múltiples demandas de los vecinos.

De los 3.700 clientes afectados de las parroquias de O Hío y Aldán, el 70% recuperó el suministro entre los 10 y los 45 minutos; 950 clientes recuperaron el servicio entre los 60 y los 120 minutos y los últimos clientes recuperaron el suministro a las 6, horas. El primer aviso entró en la compañía eléctrica a las 12.40 horas. Los últimos 43 clientes son los que dependen directamente del transformador de As Barreiras.

El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos (ACE), remitirá una carta a la empresa con el propósito de mantener una reunión en Cangas sobre los problemas de suministro eléctrico en estas dos parroquias. Afirma que sería una reunión a la que también están invitados a asistir todos los portavoces de la corporación municipal de Cangas. El Concello exige explicaciones a la empresa de los motivos por los que son tan habituales y prolongados los cortes en estas parroquias.

El regidor local advierte de que se trata de un problema que sufrieron todos los alcaldes del municipio y que parecía que se había solucionado. De hecho, añade, Xosé Manuel Pazos, Fenosa, ahora Energy, presentó un plan de inversiones que comunicó que se había ejecutado. Pero vistos los resultados, está claro que algo no se hizo bien, según señala el alcalde de Cangas que considera que no se trata de un corte de suministro eléctrico aislado, sino que son continuos a lo largo de los años y que cuando se pensó que se había encontrado la solución con las modificaciones realizadas en la línea , resulta que no, que los apagones vuelven a producirse con una frecuencia inusual, impropia del siglo XXI. Y es que ya no hace falta una tormenta eléctrica para dañar el suministro eléctrico, ahora las incidencias ocurren incluso cuando brilla el sol, como sucedió el domingo, con casi 30º de calor.

El alcalde anima a los clientes de Energy a presentar reclamaciones por los daños ocasionados por la falta de luz en sus casas. Es algo que ya realizaron en su momento, pero que el resultado no fue el más satisfactorio y que en muchos casos hubo que acogerse a las coberturas de los seguros. Los vecinos están hartos y piden al gobierno local al que está, y al futuro, que actúe de manera contundente.