La conferencia "Hands off Venezuela" organizada en Moaña por "persoas apoiadas por 17 organizacións galegas" y con la colaboración del Ateneo de Moaña y del Centro Social Trevoada comenzó con mucha tensión ayer en Moaña. Los ponentes de un acto en clara defensa del régimen de Nicolás Maduro tardaron media hora en tomar la palabra después de sufrir varios intentos de boicot. El primero en aparecer fue el concejal de XM, Javier Carro, quien intentó reventar el acto por la "vulneración dos dereitos humanos en Venezuela". Armado cun un texto de la "Declaración Universal de Derechos Humanos" fue aplaudido en primera instancia por media docena de vecinos de origen venezolano. Inmediatamente después empezó a ser silbado, abucheado e insultado por el resto de asistentes, que llenaron todos los asientos del salón de plenos moañés. "Payaso" o "provocador" fueron los insultos más repetidos, así como gritos de "libertad de expresión". Carro se fue después de que se lo pidiese un agente de la Policía Local.

Carró había intentado, por la mañana, la cancelación del evento. Lo pidió por registro. La alcaldesa, Leticia Santos, se negó argumentando que el salón de plenos se emplea por colectivos de todo Moaña y que el gobierno local no tiene la autoridad para vetar a una asociación en concreto. A la charla no asistieron representantes del gobierno local, ni del BNG ni del PSOE.

Aunque los organizadores habían anunciado la presencia del actor Willy Toledo, éste no acudió. El discurso central corrió a cargo del empresario vasco Agustín Otxotorena, que lleva 20 años viviendo en Caracas, según explicaron los organizadores. Le acompañó el cónsul de Venezuela en Vigo, Martín Pacheco, y el cónsul y exministro bolivariano Farruco Sesto.

Al poco de empezar la charla de Otxotorena, una media docena de asistentes, de origen venezolano, trataron de reventar de nuevo el acto acusando a Maduro de dictador. El público se dividió entre los que les pidieron escuchar la charla "e intervenir al final" y los que les insultaron con frases como "Venezuela está mellor sen vós alí".

El empresario que centró el discurso aludió a los que trataban de parar el acto llamándoles "lacras" y "escuálidos" en varias ocasiones. Los organizadores lograron seguir con la charla después de que dos agentes de la Guardia Civil desalojase de la sala a los que se oponían a la misma.

Comenzó después una conferencia de tinte victimista, que tuvo como tesis central culpar exclusivamente a los "medios de comunicación" de la mala imagen del régimen de Maduro en el exterior.

Oxtotorena proyecto vídeos con directos de televisiones españolas o con titulares de medios venezolanos acusándoles de "mentir y no rectificar", con ejemplos con el anuncio de que el chavismo estaba secuestrando a adolescentes para convertirlos en soldados. Mostró también una imagen de una manifestación de apoyo a Maduro "minimizada" por los medios. Para el empresario son los medios "el primer poder", argumentando que se envían periodistas a Venezuela para exagerar la mala situación del país y justificar después una supuesta intervención militar estadounidense. Se refirió a los informadores con adjetivos como "perrodistas" o "sicarios de la información".

En sus varias alusiones a la oposición venezolana, el conferenciante los tildó de "oligarquía buguesita". Aseguró que las "clases populares" que se oponen al chavismo lo hacen por estar "colonizados" por Estados Unidos y los comparó a "negros que se hacen del Ku Klux Klan". Eso sí, defendió a José Luis Rodríguez Zapatero, por su evolución en defensa del diálogo con Maduro. "Zapatero conoció a la oposición. Y cualquiera que lo hace se vuelve chavista. Es una persona justa", argumentó entre risas de los presentes.