Las posibilidades de poner en marcha la campaña de la vieira en la ría de Pontevedra eran muy limitadas. Ahora son prácticamente nulas. Durante la última semana se realizaron dos nuevos muestreos, unas analíticas que inicialmente ofrecieron una luz de esperanza ya que la primera arrojó índices de toxina dentro de lo permitido. No obstante, fue un espejismo porque en el segundo análisis, que se debe realizar con menos de una semana de diferencia con respecto al primero, la presencia de ASP volvió a dispararse.

Este último intento de abrir el recurso se centró en la zona III de la ría de Pontevedra, en el entorno de la isla de Tambo. La flota apunta que se trata de uno de los mejores lugares para trabajar y durante diciembre ya se realizaron muestreos para explorar su apertura. Como los resultados fueron negativos se intentó en la zona II. Las fuentes consultadas reconocen que abrir la campaña a estas alturas era "muy complicado". "No solo hay que tener en cuenta la tóxina, sino también cómo está la vianda y la gónada del marisco y si los compradores tienen interés en la producción", apuntan.

El resultado negativo de esta última semana supone prácticamente supone enterrar cualquier esperanza. Intentar un nuevo proceso de análisis requiere un mínimo de una semana y supone situarse en el horizonte temporal de finales de febrero, muy cerca de la época del año en la que este marisco inicia su proceso de desove. La flota de Bueu y de la ría de Pontevedra que se dedica a la vieira, que suma alrededor de media docena de barcos, deberá esperar hasta la próxima navidad.