La Cofradía de Pescadores San Martiño de Bueu cerró 2018 con cerca de un millón de kilos de capturas y un volumen de negocio muy próximo a los cuatro millones de euros (3.989.056 euros), en lo que supone uno de los mejores balances económicos de la última década. La delicada situación de la pesquería del pulpo, tradicional producto estrella en la lonja buenense, no se hizo notar en los resultados globales gracias a la diversificación de la pesca y a la apuesta que se ha hecho por otros productos en los últimos tiempos, como es el caso de la vieira.

"Os números podían ser un pouco mellores, pero manténse o bache que temos co polbo, que para nós é un producto fundamental. Cando hai un bó ano nótase ben na facturación", reconoce el patrón mayor de Bueu, José Manuel Rosas. Con todo, el pulpo sigue siendo la especie que otorga un mayor rendimiento a las arcas del cabildo morracense. En el pasado ejercicio las capturas del cefalópodo alcanzaron los 168.477 kilos, con un volumen de negocio de 1,74 millones de euros, lo que supone casi el 44 por ciento de los ingresos de la cofradía el año pasado. La escasez del producto se ha traducido con un incremento importante de los precios del mismo, si bien Rosas apunta que "parece que agora xa se estabilizaron nos 10 euros para o grande e cinco para o pequeno, o que está bastante ben". En 2018 el máximo se situó en los 15,9 euros por kilo mientras que el mínimo estuvo en 4. El precio medio fue de 10,33 euros/kilo.

Las otras tres columnas en las que basa en buena parte sus recursos la cofradía buenense, el percebe, la navaja y el erizo, no faltaron a su cita, sin grandes variaciones con respecto al año pasado. Así, el erizo reportó unos beneficios de 415.419 euros (con más de 44.000 kilos de capturas) por los 381.930 euros del percebe (se recogieron 10.329 kilos), un producto cuyo precio máximo alcanzó los 180 euros por kilo, dejando el medio en 36,97 euros. La navaja, por su parte, supuso unas capturas de 29.248 kilos y unos ingresos de 304.128 euros.

Pero la clave para mitigar el bajón con el pulpo ha sido la diversificación. "Anos atrás tivemos a sorte de traballar con Porto Cambados e Mariscos Veiro para a extracción de vieira, o que supuxo un alivio económico para nós", señala Rosas, que añade que "isto supón non só una maior facturación, senón tamén desconxestionar otros recursos. É moi importante para manter o equilibrio". Fuera de las cuatro grandes especies de Bueu, otras tres superaron la barrera de los 100.000 euros de beneficio. Fueron el jurel, con 162.000 euros (y 195.000 kilos de capturas); la almeja rubia, con 156.884 euros de facturación y 16.661 kilos recogidos; y la centolla, cuyos 11.916 kilos vendidos en lonja generaron 120.582 euros. El patrón mayor apunta que "na mayoría de productos hai certa estabilidade nos prezos. Pode haber oscilacións puntuais no verán ou no Nadal, pero cada ano son máis ou menos o mesmo".

Solo dos años mejores

Desde 2009 solo en dos ocasiones se mejoraron las cifras del último ejercicio. El mejor año para el cabildo buenense fue el 2016, cuando se llegó a los 4,5 millones de euros de beneficio, fruto principalmente de la última gran campaña del pulpo, en la que las capturas del cefalópodo significaron 2,4 millones y casi 400.000 kilos. En 2011, el producto estrella de Bueu también impulsó unos resultados ligeramente superiores a los del pasado año, con 3.996.000 euros de ingresos (más de 2,3 millones de euros correspondientes al cefalópodo).

En cuanto al volumen de las capturas, los 999.702 kilos de 2018 superan los 913.000 del año anterior y son la segunda cifra más elevada de la última década. En este periodo solo en 2010 se sobrepasó el millón de kilos, con 1.028.911 en ese ejercicio.