La presencia de siete caballos en la Feira EcoArtesá que reunió este domingo a miles de personas en la alameda de Moaña levantó los recelos de los animalistas. Así, la Asociación Animalista Libera elevó una crítica ante el Concello por "avalar una actividad lesiva e innecesaria para los équidos", criticando tanto la presencia de caballos atados como que los niños se sacasen fotos "como si fuesen meros objetos decorativos". Unas críticas rechazadas de plano por el gobierno local y por la asociación caballar Adoc, cuyos asociados son los dueños de estos caballos particulares.

La concejala de Promoción Económica y organizadora de la feria, Coral Ríos, recuerda que se usaron en los siete eventos de este tipo celebrados hasta la fecha y que Adoc colabora con el Concello "e o seguirá a facer" en actividades como la cabalgata de Reyes Magos o la Feira Moaña Antiqua. Esgrime los cuidados que reciben los caballos. "Apenas estiveron no paseo pola tarde, e en dous turnos. Baixaron ao centro escoltados pola Policía Local para evitar problemas e permaneceron nun recinto pechado, con palla e auga, e acompañados en todo momento polos seus donos".

La edil señala que no son caballos "alquilados nin dun circo, nin maltratados. Son de particulares. Están acostumados a levar aos seus donos e se subiron os nenos porque a intención é achegar aos animais á rapazada dun xeito amable, xa que moitos non teñen oportunidade de coñecelos polo distanciamento actual do mundo rural". Aplaude, además, la implicación de Adoc, "que incluso fai terapias con axuda dos cabalos con alumnos do colexio Juan XXIII", desvela.

Desde Libera, por su parte, aseguran que los équidos "tienen necesidades básicas que parecen no haberse cumplido en favor de mantenerlos como si fueran una atracción" y añaden que los animales "no son juguetes, con independencia de la especie a la que pertenezcan".

En sus quejas, desde Libera ponen en tela de juicio la imagen que se traslada a la infancia y adolescencia "si se mantiene atado durante toda la tarde de un domingo a estos caballos, que podían ser tocados o golpeados por cualquier persona". Esta afirmación es duramente rechazada por el gobierno local, asegurando que nadie golpeó en ningún momento a los animales "e nin sequera se empregan nin fustas nin espuelas de equitación", apunta Ríos.

Además de recordar que Moaña es un Concello declarado libre de circos con animales, desde la asociación animalista trasladaron una solicitud de información para conocer "qué autorizaciones otorgó" la administración local para esta actividad, que a juicio de Libera "guarda muchas similitudes con una práctica habitual de los circos con animales".

Desde Adoc se pronuncian también tras conocer estas quejas, insistiendo en que su intención es "achegar os cabalos ao público" y alegando que, además del dueño de cada caballo, también contaron con cuidadores durante el tiempo que estuvieron en la alameda "baixo a sombra de árbores".

La asociación caballar considera "totalmente ridículas" las quejas que suscitó la actividad.