El que terminó ayer fue el fin de semana con mayor afluencia a las playas de Cangas de lo que va del verano. También fue cuando más denuncias realizó la Policía Local en zonas de playa. Ayer a las 19.00 horas se habían superado ya las 130 sanciones y dos motoristas y una patrulla de la Policía Local continuaban a esa hora vigilando la zona rural de acceso a las playas. Precisamente ayer quedaron colapsadas las vías a varias playas a primeras horas de la tarde, lo que obligó a intervenir a la Policía Local de Cangas. Los puntos más conflictivos fueron Areabrava, Viñó, Barra, Arneles, Castiñeiras y Nerga. Incluso en el vial del Camino Viejo que conduce a la playa urbana de Rodeira hubo atascos importantes. La mayor parte de las denuncias impuestas por la Policía Local de Cangas respondieron a estacionamientos dentro de los carriles de circulación delimitados, con sanciones de 80 euros, excepto las que obstaculizan gravemente el tráfico, cuya cuantía asciende a 200 euros.

Actos que influyeron

Al mediodía se produjeron retenciones en el municipio como consecuencia de la concentración y desfile hasta Aldán de más de un centenar de coches antiguos, acto que coincidió también con la romería de San Roque do Monte.

Cerca de las 21.00 horas comenzó el gran flujo de coches desde las playas hasta la vía rápida. Desde las 19.30 ya había problemas de retenciones en los cruces de O Viso y Vilariño. El tráfico era lento y la incorporación a la vía rápida necesitaba una amplia dosis de paciencia. No obstante, la Policía Local señala que los atascos en los cruces y accesos a playas fueron menores que el sábado e incluso que el día 15 de agosto.

Corredor y Autovía

Alrededor de las 21.00 horas había retenciones en el corredor, concretamente desde la salida de Cangas hasta el enlace con la autovía en Meira, en el tramo que sigue en obras para su desdoblamiento. En la rotonda de Domaio el tráfico era intenso, pero bastante fluido. A la hora de cerrar esta edición no se había producido ningún accidente de circulación, ni en los cruces ni en la vía rápida.

En cuanto a las comunicaciones, también se incrementaron el número de llamadas, que imposibilitaban en algunos casos una respuesta inmediata por parte de los afectivos desplegados por la Policía Local, debido a que existe solo un desvío de llamada, lo que obliga a reubicar a un agente en la base para la coordinación de las comunicaciones, señalaba ayer el jefe de la Policía Local, Alberto Agulla.