El sector servicios relacionado con el turismo ha espoleado a lo largo del mes de julio el mercado laboral de la comarca. En total se ha reducido la cola del paro en 310 trabajadores, lo que supone un descenso acumulado este verano de 602 parados menos, al sumar la creación de 292 puestos de trabajo en el mes de junio. Eso sí, las buenas cifras del último mes son muy dispares en función del municipio. Así, mientras en Marín hay 116 vecinos menos en paro y en Cangas esta bajada llegó a 116, Moaña refleja la peor cara de la moneda con un aumento del paro en siete trabajadores.

Se trata de una cifra dura para el mercado laboral moañés, dado que julio es un mes de generación de empleo por excelencia. De hecho, en el mismo periodo de 2017 el paro había caído en 55 personas en esa villa. En lo que respecta a Bueu, el paro cayó en 83 trabajadores en los últimos 30 días.

Eso sí, en total la comarca cuenta todavía con 5.211 trabajadores que buscan un contrato de trabajo. Se trata de una cifra alta, aunque sensiblemente más baja que en los peores años de la crisis. De hecho, la tendencia interanual es positiva, pues julio de 2017 había concluido con 5.806 desempleados, con lo que O Morrazo tiene en estos momentos 597 parados menos que hace un año.

Por sectores, el empleo estacional relacionado con el sector servicios es claramente el gran motor de la comarca. Y es que de todos los puestos de trabajo generados en los últimos 12 meses, los servicios son responsables de sacar del paro a 357 trabajadores de O Morrazo. Le sigue a bastante distancia la construcción, con un descenso en el número de desempleados de 141 trabajadores.

La industria, por su parte, refleja un crecimiento mucho más lento al ganar solo 49 puestos de trabajo desde el pasado verano. Las cifras más discretas las presenta el mercado laboral relacionado con el sector pesquero. El que fuera un refugio para muchos en los peores momentos de la crisis se muestra ahora como un sector poco dinámico en cuanto a la generación de nuevos puestos de trabajo. Con respecto a julio de 2017, el sector pesquero cuenta con apenas 11 desempleados menos.

Por franjas de edades, la creación de empleo no está beneficiando en absoluto a las capas más jóvenes de la sociedad morracense. Y es que de los casi 600 puestos de trabajo generados en el último año, hasta 549 fueron a parar a vecinos mayores de 25 años. De entre los trabajadores menores de dicha edad, la Oficina de Emprego de Cangas solo registra un desempleado menos, sumando todavía 216 buscadores de un trabajo remunerado.

Brecha de género

En lo que respecta a los sexos, la brecha de género se puede percibir claramente en el mercado laboral morracense. En el último año el número de mujeres en paro cayó en 178, pero el de varones lo hizo en 417 personas. En total en estos momentos son 1.989 los hombres en edad activa sin un trabajo, mientras que en el caso de ellas, esta cifra crece de forma alarmante hasta las 3.222 trabajadoras.