El Concello de Cangas y representantes de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Ribeiras do Morrazo mantuvieron ayer una reunión para abordar las posibles vías de colaboración entre ambas partes. Desde el gobierno local se comprometieron a facilitar la organización de actividades por parte de la IXP en localidades y espacios municipales, así como a divulgar y promocionar este certificado de calidad.

Los viticultores se reunieron con el alcalde, Xosé Manuel Pazos, al que solicitaron colaboración en distintos frentes. Entre sus peticiones está que el Concello facilite el acceso a instalaciones municipales que puedan albergar actividades relacionadas con la IXP, como charlas divulgativas o de apoyo técnico a los viticultores; colaborar en la difusión y divulgación de sus acciones; incorporar información relativa a la IXP a la página web del Concello; o el apoyo económico para realizar algunas actividades o gestiones. Pazos se mostró receptivo a las solicitudes y garantizó el respaldo del consistorio.

La IXP Ribeiras do Morrazo engloba a ocho municipios -Cangas, Moaña, Bueu, Marín, Vilaboa, Pontevedra, Poio y Redondela- y se calcula que hay 2.340 hectáreas dedicadas al viñedo y 25.400 viticultores en todo el territorio. La directiva apunta que entre sus prioridades está actualizar y regularizar la información de las parcelas en el registro vitícola gallego, recuperar superficies de las variedades autóctonas autorizadas en la IXP y realizar actividades y charlas divulgativas para viticultores y propietarios de parcelas destinadas a viñedos.

La IXP fue aprobada por la Comisión Europea a principios de este año y hay cuatro bodegas adheridas a esta certificación: Adega Ardán (Marín), Os Areeiros (Vilaboa), Mosteiro de Poio (Poio) y Reboiraina (Redondela), que ya han puesto en el mercado los primeros vinos con la etiqueta IXP. Esta certificación ampara a un total de 14 variedades de uva, siete blancas y otras siete tintas.