El horizonte judicial del conductor que provocó el accidente múltiple en la Autovía do Morrazo la tarde del jueves dependerá de las declaraciones que recoja la Guardia Civil. Los agentes están a la espera de obtener el permiso de los servicios médicos para poder acceder a hacerle las pertinentes preguntas. Después de que la pareja del conductor suicida presentase una denuncia ante la Policía Nacional por violencia de género, ésta se trasladó la Guardia Civil, que está llevando la investigación de lo ocurrido.

En la denuncia, la pareja del conductor, que iba de copiloto, se ratificó en la versión de los hechos que gritó tras el accidente y mientras el denunciado trataba de arrojarse contra un coche en un intento de suicidio. Explicó que ambos estaban discutiendo en la furgoneta y que el conductor trató de estrellarla embistiendo contra un turismo y acabando detenido tras golpear contra la mediana. La intención sería matar o causar daño físico a su pareja, según la denuncia. Después fue cuando cruzó la mediana y se arrojó contra un coche que circulaba en dirección Vigo.

Tras la declaración, que presumiblemente se producirá la próxima semana, la Guardia Civil decidirá si el varón pasa a estar investigado o detenido. De momento no se encuentra bajo vigilancia policial, solo médica.

El conductor sigue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Povisa de Vigo. Según ha podido saber FARO, está consciente y ayer le fue retirada la respiración asistida. Ha podido recibir sus primeras visitas limitadas, por lo que es posible que a comienzos de semana puedan entrar a tomarle declaración los efectivos de la Guardia Civil.

El diagnóstico de su estado de salud revela que, tras el atropello que forzó, sufrió múltiples fracturas en un pierna que podrían complicarse, así como una fractura en el cráneo, por lo que, más allá de la necesaria vigilancia, el temor a posibles complicaciones hace que sea imprescindible mantenerlo en la UCI.

Hasta ayer contaba con respiración asistida y las constantes con las que llegó al hospital el jueves en la ambulancia implicaban riesgo grave, de ahí que pasase inmediatamente a la UCI.

El conductor del coche que fue embestido en primer término por este conductor, un Peugeot 205, narró al día siguiente de los hechos para FARO el momento del accidente. "Lo vi venir por el retrovisor, quise escapar pero ya no me dio tiempo. Fue en el lugar en el que se estrecha la carretera y no tenía donde meterme. Solo pude agarrarme al volante y esperar".