El pleno municipal de Marín se inició ayer con un nuevo reparto de escaños en la bancada de la oposición. Tras la renuncia al grupo del BNG de su exportavoz, Pilar Blanco, y del concejal Alfonso Fernández, la ahora única edila del BNG, Lucía Santos, pasó a sentarse al lado de los cuatro concejales del PSOE, mientras que sus excompañeros de grupo cambiaron de lugar en la segunda fila, ahora junto a los tres ediles de Marea.

Tras visibilizar la separación del grupo de forma geográfica, sus discrepancias se hicieron también palpables en el debate de alguna de las mociones. Así, en la propuesta del BNG para dar una calle de nueva apertura a Carmen Pesqueira "A Capirota" (vecina represaliada y asesinada por el franquismo), la concejala no adscrita y exportavoz del BNG, Pilar Blanco, calificó de "bastante chapucera" la tramitación de esta moción, presentada por la nueva portavoz nacionalista, además de apuntar que Marín "marcará un precedente" por dar nombre a una calle que todavía no existe.

Blanco recordó que la propia familia de Carmen Pesqueira Domínguez, además de representantes de la Asociación pola Memoria Histórica de Marín, le pidieron explicaciones cuando todavía era portavoz del BNG sobre la presentación de este homenaje, sin consultar ni pedir opinión alguna a sus allegados, ni a quienes defienden la memoria de los represaliados de Marín.

En todo caso, los dos ediles no adscritos -al igual que el resto de los concejales de la corporación-, votaron a favor de la iniciativa para honrar a esta mujer, víctima de la represión de 1936.

El voto unánime de todos los concejales no impidió un agrio debate entre los grupos. Un debate en el que se llegó a descalificaciones personales, como cuando la concejala del grupo popular María José de Pazo reprochó a la portavoz socialista, Luz Santiago, que "quiere ser usted la más guapa del baile", en alusión a ser abanderada de la lucha feminista en Marín.

El comentario suscitó la indignación de la propia Santiago y también de la portavoz de Marea, Sandra Pesqueira, que solicitó a De Pazo que "expresiones como esa no se vuelvan a repetir en este pleno".

La acritud de las intervenciones en este asunto -a pesar del voto final por unanimidad- llevó a la portavoz socialista a pedir que se retirase del acta de la sesión las intervenciones de todos los grupos y que se hiciese constar únicamente el acuerdo favorable de todos los grupos para dar una calle a Carmen Pesqueira Domínguez, A Capirota.

En este cruce de reproches el PP hizo alusión a las dos veces que el debate de la moción fue aplazada a instancias del grupo socialista, a lo que Luz Santiago respondió recordando que su grupo quería que se contase con la familia, con la Asociación pola Memoria Histórica, y que se buscase además el emplazamiento "más digno posible" para dar el nombre de Carmen Pesqueira a una vía pública, al margen de que "no había prisa para aprobarlo" porque el acto de nombramiento de la calle se hará el 18 de agosto.

La portavoz del PP y presidenta de la comisión de Cultura, María José de Pazo, pidió a todos los grupos un apoyo claro a esta iniciativa del BNG, a lo que la portavoz de Marea, Sandra Pesqueira, respondió que "estamos esperando esa unanimidad que pide para retirar los símbolos fascistas que aún tenemos en Marín, en la iglesia, o en algunas fuentes", citó como ejemplos.