El día después sigue dejando un rastro inequívoco de la fortaleza de los temporales de lluvia y viento que azotaron la semana pasada Galicia. Ayer cayeron árboles, hubo desprendimientos y el cartel del parque de bomberos de O Morrazo cayó. El incidente más importante se registró a última hora de ayer en la PO-551 a su paso por la parroquia buenense de Cela. Un desprendimiento de rocas y tierra acabó sobre la calzada, llegando a alcanzar lateralmente a un automóvil. Afortunadamente no hubo que lamentar heridos.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 20.30 horas frente al bar Muíño Vello, poco antes de llegar a la gasolinera de Cela. El desprendimiento se registró en le margen derecho, afectando al carril de circulación dirección Bueu-Marín. Al lugar acudió la Guardia Civil de Tráfico y la brigada de conservación de viales de la Xunta de Galicia.

Protección Civil de Cangas retiró ayer de la carretera EP-1008, que une Iglesario con Vilariño, un árbol que cayó encima del tendido eléctrico. Por suerte, esta circunstancia no interumpió el suministro a la parroquia durante la tarde. Los vecinos saben que cosas más pequeñas dejaron sin luz a O Hío. Fueron conductores y vecinos los que avisaron al Grupo de Emergencias del Concello de Cangas. A las 16.30 horas, Protección Civil procedió a acordonar la zona y a retirar el árbol. Todo apunta a que el temporal de la semana pasada dañó al árbol y que ayer, que no se registró demasiado viento, terminó por caer. También por la tarde apareció medio desprendido l cartel del parque de bomberos de O Morrazo. Los bomberos acabaron el trabajo del viento y lo descolgaron totalmente para evitar mayores peligros.

Por la mañana, el Grupo Municipal de Emergencias intervino para retirar un arbol caído en la carretera que conduce a la Estación Depuradora.