Las emigrantes imitaban los peinados, el maquillaje y las poses de las actrices de Hollywood para enviar recordatorios a sus parientes de la aldea. Sus retratos al estilo de Rita Hayworth o Ava Gardner impactaban en una sociedad donde las mujeres vestían como viudas: "El contraste era muy grande. Aquí casi todas iban de luto, incluso las jóvenes, que parecían mucho mayores. Y desde América ellas les envían fotos en bikini y con vestidos modernos". Ellos no se quedaban atrás, y querían que sus familiares gallegos los recordasen con el bigote de Clark Gable o Errol Flynn y elegantemente ataviados de traje o smoking.